«Vamos a estudiar fórmulas adecuadas para que el proyecto de instalar dos arcos orientales en la zona de Pelayo sea compatible con el trinquet de pilota». Esta es la postura oficial del alcalde de València Joan Ribó, y también de sus socios de gobierno, el PSPV. Por tanto, la propuesta de inversión en los Presupuestos Participativos de Decidim2021 de colocar dos arcos en este barrio valenciano para dar visibilidad al Chinatown de la capital del Turia sigue adelante.

«La idea de colocar dos arcos orientales en la calle Xàtiva con Pelayo y Matemático Marzal -señalaron fuentes de Alcaldía emana de una votación ciudadana y hay que llevarla adelante, pero vamos a estudiar las fórmulas para hacerla compatible con el Trinquet de Pelayo, que es uno de los elementos más simbólicos y significativos de nuestra ciudad», señalaron las mismas fuentes.

El alcalde Joan Ribó es conocedor del proyecto presentado por la Fundació de la Comunitat Valenciana per la Pilota Valenciana para crear un «carrer» temático del deporte autóctono en Pelayo y está dispuesto a estudiarlo para llevarlo a efecto, sin perjuicio de que se puedan hacer también las arcadas del futuro Chinatown. «Nos parece que ambos intereses son compatibles», indicaron desde alcaldía.

Por su parte, el presidente de la Fundació de la Pilota, Pepe Cataluña, ve con buenos ojos esta predisposición al diálogo por parte de Ribó y el Ayuntamiento de València. Cataluña y la Fundació no quieren que el proyecto de carrer temático de la Pilota - «un pequeño parque temático que entroncaría con una ruta cultural, turística y deportiva», como lo define él- caiga en el olvido. De hecho, el dirigente de la entidad deportiva avanzó que el proyecto para instalar 4 o 5 estatuas de pelotaris en el carrer de Pelayo y de señalizar con un cartel para dar la bienvenida a la catedral de la Escala i Corda «ya está casi acabado». Cataluña ya ha hablado con el escultor que está preparando el presupuesto para que en pocas semanas esté disponible y se pueda ejecutar.

Además, la Fundació de la Pilota solicitó una entrevista -este lunes- con Ribó para retomar el proyecto del Carrer de la Pilota que ya expusieron al alcalde y que este acogió de forma entusiasta. Mientras, relató ayer Cataluña, «seguimos adelante con la gestión del día a día del trinquet». Así, a principios de mes se renovó por un año el convenio con el empresario José Luis López, que posee la propiedad del histórico recinto deportivo. «Sin embargo, la solución a medio y largo plazo -dijo Cataluña- es que el trinquet «pase a ser de alguna administración pública». Para ello, se estudian dos fórmulas posibles y «ya hemos tenido conversaciones en ese sentido». La primera es que un consorcio formado por la Diputació, la Generalitat y el Ayuntamiento de València asuma la propiedad del edificio en funcionamiento desde 1868. La segunda opción sería que una sola institución pública se lo quede. «En esas dos vías está habiendo negociaciones», expresó. Por otro lado, la Fundació sigue adelante con el ambicioso proyecto de gestión cultural, deportivo y gastronómico para que el trinquet pueda acoger actividades relacionadas con la pelota: desde presentaciones de libros a exposiciones o incluso la proyección permanente de un audiovisual.

En cualquier caso, desde 2015, cuando el empresario José Luis López asumió la propiedad de Pelayo, este hombre de negocios ya lo hizo con la condición de hacer de puente durante unos años hasta que la administración lo asuma de forma definitiva.

Las principales suspicacias del Trinquete respecto a la ubicación de los arcos chinos en el barrio se deben a que uno al menos iría en el lugar donde la Fundació de la pilota quiere ubicar un cartel y una señal para señalizar el carrer de la pilota. Una opción sería estudiar otros emplazamientos de ese pórtico dentro de la misma zona, tal como apuntaron ayer las fuentes consultadas en Alcaldía.

En cuanto a otros colectivos y entidades, la Falla Convento Jerusalén-Matemático Marzal, el Instituto Confucio o la Asociación Cultural China en València han acogido muy bien la propuesta realizada por una vecina de la ciudad a título personal y que ha recibido 342 votos de otros tantos ciudadanos del distrito de Extramurs. Todos entienden que será un reclamo turístico para el barrio.