Penélope Cruz y Javier Bardem han pasado el fin de semana en València con motivo de la entrega de los premios Goya 2022. La pareja de intérpretes escogió un hotel de cinco estrellas de la capital del Túria situado en la plaza Manises junto al Palau de la Generalitat que fue inaugurado en 2019.
Se trata de uno de los hoteles de lujo que tiene València, aunque en este caso con un marcado estilo clásico inspirado en los años 30. Para su visita fugaz al 'cap i casal', Penélope Cruz y Javier Bardem escogieron este establecimiento hotelero tipo 'boutique' con un estilo que respeta los elementos originales de esta construcción. No fueron los únicos que apostaron por este establecimiento, ya que la actriz galardonada con el primer Goya Internacional de la historia de los premios del cine español, Cate Blanchett, también ha dormido en el Palacio Vallier.
A su salida, a eso del mediodía de este domingo, algunas de las personas que disfrutaban de un aperitivo al sol de la ciudad se han visto sorprendidos por la irrupción de la pareja de actores españoles más conocida dentro y fuera de nuestras fronteras. Penélope, ataviada con una chaqueta roja y bebiendo un café para llevar salía primero. Javier, con una gran bolsa en la que podría guardar su Goya al mejor actor, seguía a la actriz unos pasos por detrás.
Pero la aparición de ambos ha revolucionado la zona al suponer una enorme sorpresa que, en cuestión de segundos, se ha convertido en alboroto. Los intérpretes se han apresurado a subir a una furgoneta. "Llegamos tarde al AVE", se disculpaba Bardem con quienes le felicitaban por el galardón.
Un hotel con mucha historia
Blanchett, Cruz y Bardem han dormido en un edificio con historia, que fue mandado construir por Francisco Royo y Salvador, un rico hacendado que compró la antigua Casa Bailia, que funcionaba como Archivo, y una vivienda anexa para levantar su residencia habitual. Símbolo de su poder económico, el empresario decidió ubicar su palacio en una localización inmejorable, cerrando el lado oriental de la plaza de Manises.
La construcción del Palacio Vallier se inició en 1883 y fue encomendada al arquitecto Salvador Monmeneu con un estilo señorial propio de un edificio colindante con la sede del gobierno autonómico valenciano. Antes de convertirse en hotel antes de la pandemia, el Palacio Vallier fue sede del Tribunal Supremo tras la Guerra Civil, en los 70 se convirtió en la Casa Americana y en los noventa acogió parte de las instalaciones de la Diputación de València.