La inauguración, a falta de varios remates, de las plazas del Mercat y Brujas deja más en evidencia el abandono y deterioro que sufren las famosas «covetes» de Sant Joan, cuyos propietarios buscan financiación y apoyos para poner en marcha la rehabilitación del conjunto y darle uso como mercado de artesanía. La asociación «Recuperem les covetes» de Sant Joan ha puesto en marcha una campaña de recogida de apoyos a través de la plataforma change.org para impulsar la rehabilitación de las construcciones en la que llevan alrededor de 150 apoyos. 

La entidad ya ha recibido el visto bueno de la Conselleria de Cultura al proyecto de rehabilitación de las fachadas, firmado por el arquitecto Carlos Campos (experto en recuperación del patrimonio y director a su vez de la rehabilitación de la iglesia de los Santos Juanes) en estos antiguos locales comerciales. Las «covetes» son unos pequeños locales adosados a la fachada de la iglesia de los Santos Juanes que llevan años cerrados y sin uso.

Los locales se construyen a comienzos del siglo XVIII, en el contexto de la reforma barroca de la iglesia, bajo la amplia terraza anexa al templo, aprovechando el desnivel del terreno a los pies de la falsa fachada recayente a la plaza del Mercado. Las conocidas como «covachuelas o covetes» son 19 pequeñas tiendas-taller construidas en dos fases, se convirtieron en puestos fijos de un mercado ubicado en este espacio desde, al menos, la conquista cristiana de la ciudad, explica Recuperem les covetes en su renovada página web. 

Las «covetes de Sant Joan» son Bien de Interés Cultural como parte integrante de los Santos Juanes y el Plan Especial de Ciutat Vella las protege y blinda su uso como espacio dedicado a la venta de productos de artesanía. El conjunto forma parte del triángulo de oro patrimonial de Ciutat Vella formado por Lonja, joya del gótico civil y Patrimonio de la Humanidad, los Santos Juanes y el Mercado Central.

El conjunto está justo enfrente a la Lonja, cuya silueta queda ahora realzada tras la intervención de mejora urbana y peatonalización del entorno de la plaza impulsado por la Concejalía de Desarrollo Urbano, en la que han sido talados los árboles que ocultaban la fachada del monumento. La asociación «Recuperem les covetes» que aglutina a la mayoría de propietarios y propietarias de estos históricos puestos comerciales se constituyeron en octubre de 2019 como asociación con el objetivo de restaurar y revitalizar este conjunto único en València. La entidad destaca entre las dificultades burocráticas para recuperar las covetes la ambigüedad documental y la diversidad de administraciones con competencias sobre el asunto. 

El alcalde, Joan Ribó, ha dado su apoyo a los dueños de las «covetes» y ha manifestado su voluntad de colaborar.

 Los dueños privados de las covetes confían en que la recuperación de las plazas y la capitalidad del Diseño en 2022 sea un revulsivo para la puesta en valor de estos locales histórico, hoy vallados, degradados y cubiertos de malas hierbas.