Intentaron desbloquear la situación, pactaron y acordaron un programa común con Pedro Sánchez como candidato a presidir el Gobierno. Las medidas presentadas suponían realmente cambio y regeneración de la vida política pero lo demás grupos, por intereses partidistas, no solo no respetaron ni valoraron el acuerdo y el esfuerzo de sus protagonistas, moderados y limpios de corrupción, sino que los rechazaron y despreciaron votando no para que todo siga igual. Parece que va a haber nuevas elecciones y a los medios de comunicación mayoritarios „es obvio al servicio de quién están„ les faltó tiempo para la crítica. Se abre un período preelectoral y como es habitual, la cuestión mediática suele jugar un importante papel canalizando la intención del voto mediante el tratamiento sutil de la información. No quieren a la socialdemocracia en el poder, así que en este panorama Sánchez lo tiene crudo pues no cuenta con ningún medio importante afín. Por otro lado, el listillo de Iglesias ignora esta circunstancia, o finge que la ignora, y colabora activamente con los que se oponen al cambio. En una coyuntura como la actual, el todo o nada que continuamente esgrime suele quedar en nada. Luis Carlos Rada. Valencia.