Alucino con los impuestos que se están sacando de la manga estos políticos de pacotilla. El otro día fui con la familia al lago de Anna y me encontré con la sorpresa que había que pagar 3 euros por persona por bañarse, cuando es una zona protegida y hasta hoy de dominio público gratuito. Siguiendo este nuevo negocio para recaudar dinero se ha incorporado rápidamente Navajas que cobrará una entrada por bañarse según el concejal de Turismo, Francisco Rosalén, en el popular paraje del Salto de la Novia. Solo los vecinos empadronados o con residencia se librarán de pagar en verano. Todo ello justificado para tener limpio el recinto.
Estamos viviendo una época en que todos los impuestos que pagamos ya no son suficientes para el mantenimiento de sueldos y enchufados y políticos, por lo que se están inventando con justificaciones que no tienen pie ni cabeza unos impuestos turísticos a valencianos, por el mero hecho pisar lo público, ya que lo tienen fácil con aprobarlo en un pleno. Pero, por favor, esto es como si un delincuente justificase el robo porque su medio no le permite vivir con grandes lujos. Enrique Fernández Iniesta. València.
