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Los cuatro chiringuitos musicales de la playa de l'Arenal, de Burriana, siguen aún sin licencia de apertura y a la espera de que el consistorio mueva ficha. El ayuntamiento tiene sobre la mesa dos alegaciones a las que responder. Una de un particular y otra de los gerentes de los chiringuitos sobre dos resoluciones municipales.
La primera alegación fue presentada por un vecino de la zona marítima que sumaba la interposición de un recurso contra la resolución del ayuntamiento en lo que a la documentación exigida a los locales de ocio se refiere.
La segunda la respaldan los gerentes de los chiringuitos en contra de la resolución de cierre de los mismos por carecer de licencia de apertura y dependiendo de la resolución al primero de los recursos, los propietarios de los chiringuitos deberán aportar nueva documentación o será suficiente con la ya presentada en su día.
Por delante restan dos fines de semana en los que los chiringuitos podrían estar todavía abiertos, pero de todos modos lo que queda patente un verano más es la lentitud con la que actúa el propio consistorio a la hora de otorgar las correspondientes licencias de apertura, lo que motiva sanciones por abrir los recintos de ocio antes de tener todos los papeles en regla y no perder fines de semana.
Y es que el periodo en el que pueden funcionar los chiringuitos en Burriana está muy acotado por las propias fiestas patronales en honor a la Mare de Déu de la Misericòrdia que arrancan siempre el primer fin de semana del mes de septiembre. Este verano las inclemencias meteorológicas han respetado bastante el ocio nocturno en fin de semana, aunque no en todos.
Así, pese a lo fulminante de la decisión del grupo de gobierno de ordenar el cierre de los chiringuitos, el tiempo ha demostrado que todo sigue igual.
