En tiempos en los que muchos estudiantes no encuentran un reconocimiento profesional a sus méritos académicos, la concesión de una beca para incentivarles ha despertado talentos ocultos. Así ha ocurrido en los institutos de secundaria de Almassora. Tanto el Álvaro Falomir como el Vila-roja competirán por las ayudas económicas que destina la refinería BP Oil a los mejores estudiantes de Ciencias.
El director de la planta del polígono del Serrallo, Emilio Marín, firmó esta semana un acuerdo con los responsables de los centros y el alcalde de Almassora, Vicente Casanova, para ratificar la beca valorada en 3.000 euros y el convenio de prácticas en la empresa. Los alumnos no han tardado ni un minuto en ponerse manos a la obra. Aunque el curso ya ha alcanzado el ecuador, los laboratorios están a pleno rendimiento.
El responsable del IES Álvaro Falomir, Xavier Trenco, reconoce que la beca de BP supone un "incentivo" al trabajo diario de los chavales que están a punto de acceder a la universidad con más dudas que antes. Una de las titulaciones más perjudicadas por el efecto de la crisis en la provincia ha sido la licenciatura de Químicas. Con un puesto casi asegurado en cualquier empresa azulejera, las aulas de la UJI se llenaron de alumnos en los 90 y 2000 en busca de seguridad en el trabajo. Pero la especialización tan específica en el ámbito de la cerámica, explica Trenco, ha dejado ahora al descubierto a tantos profesionales formados en Castelló. En la última convocatoria de prácticas, BP sólo contó con dos becarios de la provincia ante la fuga de alumnos a otras titulaciones.
Situación similar se produjo en las ingenierías relacionadas con la Informática, el avance de la tecnología obligó a las empresas a ampliar sus recursos humanos en este sentido. Las cosas han cambiado. Los despidos, los ERE y el descenso de las ventas en las plantas industriales ya no requieren del mismo volumen de licenciados.
La cultura del esfuerzo
En los institutos la cultura del esfuerzo tampoco está de moda. "En nuestro instituto sólo podrán optar a la beca 14 ó 15 alumnos, y lo mismo ocurre en el IES Vila-roja", asegura el director del Álvaro Falomir. "Los estudiantes eligen carreras más sencillas, o de tres años o que requieran de menos esfuerzo", indican estas fuentes. Esta tendencia se traslada más tarde a las universidades, donde "las titulaciones con mayor número de vacantes están en la rama de Ciencias", añade.
Es por ello que hasta la UJI intenta motivar a los talentos científicos a través de, por ejemplo, olimpiadas matemáticas?. La iniciativa se traslada ahora a los dos institutos de Almassora, en los que los responsables de los departamentos de Ciencias ya han comunicado a sus alumnos las bases del concurso y ultiman la línea de investigación para acceder al certamen.
De hecho, han sido los propios directores de departamento quienes se han reunido con el personal de BP en varias ocasiones para coordinar las bases de la beca. Ahora los profesores de Biología, Física y Química y Matemáticas (en el caso del IES Vila-roja también participará el departamento de Tecnología) organizan a sus alumnos, "que en el Álvaro Falomir son los que consiguen mejores notas en Selectividad", para acceder al concurso.
