La Guardia Civil ha iniciado una investigación para localizar al autor del incendio que arrasó un total de 75 hectáreas de la Serra d'Espadà de los términos municipales de Azuébar y Almedíjar, ya que se trabaja sobre la hipótesis de que fuera intencionado. Así lo confirmaron ayer fuentes del centro de coordinación de emergencia quienes afirmaron que, por las primeras investigaciones llevadas a cabo tanto por el Seprona como por el equipo de investigación, todo apunta a que el incendio que el pasado lunes por la tarde arrasó parte de este parque natural de alto valor ecológico en el barranco de la Mosquera haya sido provocado por la mano humana.

El pasado martes ya se barajaba ésta como una de las hipótesis que más peso cobraba. Ahora, las posibilidades de que un fallo humano por una quema de rastrojos incontrolada o el que unos excursionistas pudieran haber realizado un fuego, al parecer, han sido prácticamente ya descartadas debido a la hora y al lugar acotado como de inicio de las llamas. A las 18,30, hora de inicio, ya había oscurecido completamente y el lugar donde se iniciaron las llamas es una zona totalmente escarpada y con ningún terreno de cultivo en su alrededor, a la que se accede a través de un camino por la pista forestal.

Una situación que hace suponer que el autor o autores de los hechos habrían entrado hasta el punto de origen y prendido de forma directa el foco que posteriormente, y debido a las rachas de viento de más de 70 kilómetros hora, saltaron de un lado a otro del camino abriendo dos flancos de fuego, uno hacia el término municipal de Almedíjar y otro hacia Azuébar.

Por su parte, el alcalde de Azuébar, Gerardo Miravete, apuntaba que, a pesar de no contar con más datos oficiales por parte de la Guardia Civil, "por lo que hemos podido averiguar, todo apunta a que la línea de investigación continúe por la de que haya sido totalmente intencionado". Miravete aseguró ayer que en la zona afectada, a falta de una estimación más precisa "no hay nada de zona de cultivo, por lo que corroboraría más la versión de que la quema de rastrojos agrícolas no haya sido la causa". "Es más al tratarse de una zona altamente protegida por su gran valor ecológico, los propios vecinos que en los aledaños del parque natural cuentan con campos de cultivo ni siquiera suelen realizar quemas de rastrojos allí. Normalmente las sacan al camino y se las llevan para quemar en otro sitio porque el peligro es grande", explicó el alcalde. El munícipe confirmó que durante la jornada del lunes, no hubo solicitud de ningún permiso para quemar en esta zona.

Asimismo, el alcalde explicaba que desde la dirección del consorcio de bomberos y tras realizar una primera estimación aérea, la parte del bosque de mayor valor ecológico que podría haberse visto afectada -la del bosque de alcornoques en el corazón del barranco de la Mosquera- "parece que no ha sido del todo dañada por el fuego, ya que las copas de los árboles se ven verdes en su mayoría".

De las 75 hectáreas quemadas, una parte es propiedad municipal, y otra de propietarios privados. Desde el ayuntamiento, han asegurado que una vez se dé el incendio por extinguido y se puedan valorar con más tranquilidad los daños reales, se pondrán a disposición de los propietarios que deseen o puedan pedir indemnizaciones.