El Ayuntamiento de Vila-real ha presentado un recurso contencioso administrativo contra la decisión de la Diputación de Castellón de no devolver al municipio los cerca de 20.000 euros correspondientes a una supuesta compra de entradas para la corrida de toros de la Beneficencia organizada por la administración provincial. Según explicó ayer el alcalde, José Benlloch, la presentación del recurso llega después del silencio administrativo "negativo" que recibió el ayuntamiento tras recurrir el decreto de la diputación por el que se retenía esa cantidad no pagada del dinero recaudado en Vila-real mediante el servicio de gestión de multas de tráfico.
"Hace dos meses que Vila-real no ingresa los pagos de las multas que se cometen en nuestro término porque la diputación ha decido cobrarse de este convenio a modo de compensación los 19.850 euros que supuestamente adeudamos con cargo a 250 entradas de la Beneficencia de 2010 y otras 250 entradas de 2011", explicó el primer edil que añadió que según las averiguaciones realizadas desde el ayuntamiento estas entradas "nunca llegaron a comprarse".
"Desde Diputación nos dijeron que habláramos con el anterior equipo de gobierno. El entonces alcalde, Juan José Rubert, nos remitió a la jefa de gabinete que tomaba las decisiones en este tema y, ésta, nos aseguró que en 2010 no llegaron las entradas y que el año pasado llegaron pero se devolvieron todas. Además, el anterior portavoz del PP, Ignasi Clausell, defendió también esta postura en un pleno por lo que consta en acta", puntualizó Benlloch.
Ante la falta de explicaciones por parte de la diputación, el alcalde argumentó que no han tenido más opción que presentar este nuevo recurso. "Hubiéramos preferido no llegar a este extremo pero debemos defender los intereses de nuestros vecinos ante una decisión unilateral y arbitraria de la Diputación de Castelló que priva a la localidad de 20.000 euros que le corresponden. No esperábamos tener que dejarnos ni un euro en defendernos en esta causa sobre todo porque contamos en Vila-real con un concejal que es a su vez diputado provincial y responsable de Cultura, Héctor Folgado, precisamente el área de la que depende la Escuela Taurina", lamentó Benlloch.
El primer edil señaló que en el recurso presentado se demuestra que la diputación "ha incurrido en un cúmulo de defectos de forma que incluso han podido dejar al ayuntamiento en una situación de indefensión y, lo que es más importante, una cuestión de fondo".
Según Benlloch, la diputación "no puede cobrar un servicio que no ha prestado porque las entradas para las corridas de toros de la Beneficencia ni se han adquirido ni han llegado jamás a este ayuntamiento y, por lo tanto, les exigimos que devuelvan los 20.000 euros que se han quedado y que son de los vila-realenses", exigió. El alcalde lamentó esta "falta de lealtad entre administraciones".
Acuerdo vía pleno
En cualquier caso, el máximo responsable municipal indicó que, para evitar confrontaciones y gastos en tribunales, se presentará una moción al pleno para instar a la corporación provincial a que pague su deuda con Vila-real, evitando la vía judicial. "Si la diputación rectifica, no tendremos ningún problema en retirar el recurso y pactar fórmulas de cobro, pero no podemos permitir que se quede 20.000 euros de los vecinos por unas entradas de toros que los propios responsables municipales de esos años aseguran que no se compraron", aseguró Benlloch.
