La nueva obra social de Bancaja aprobó ayer sus nuevos estatutos y confirmó la financiación de nueve millones más el 11 % de su presupuesto anual a la fundación Caja Castelló. Este importe llega in extremis, cuando la entidad castellonense barajaba un recorte de actividades en 2014 por falta de fondos.

La aportación fue acordada ayer por la gestora de Bancaja, según el presidente de Caja Castelló, Juan Manuel Aragonés, y pretende compensar la consignación que reivindica la entidad castellonense por la fusión en 1991 de las cajas valenciana y castellonense. Caja Castelló se ha independizado de Bancaja tras la extinción de la antigua caja valenciana y ha venido reivindicando 20 millones a Valencia. Bancaja asume en parte esta demanda y prevé alcanzar la cantidad reclamada a través del 11 % de las cuentas anuales de la obra social valenciana.

Asimismo, destinará 3 millones a la fundación de Segorbe más un 5 % del presupuesto de Bancaja. A diferencia de la de Castelló, Segorbe se mantiene integrada en la obra social valenciana.

A pesar de su independencia, Caja Castelló mantendrá un ligazón con Bancaja y, al respecto, Juan Manuel Aragonés será uno de los doce integrantes del nuevo patronato de Bancaja, que estará presidido por el arquitecto Rafael Alcón Traver.

La financiación aprobada ayer fue planteada en junio por el secretario general del PP valenciano, Serafín Castellano. Desde entonces, Caja Castelló ha aguardado como agua de mayo la constitución del patronato valenciano para confirmar una liquidez básica para su continuidad. En septiembre, el presidente de Caja Castelló advirtió que si este dinero no llegaba este año se vería obligado a recortar las actividades en 2014. Su presupuesto ha bajado de los siete millones de la etapa de crecimiento económico a los 1,2 millones de este ejercicio.

Aragonés destacó ayer que esta cuantía supone una salida para las cuentas de la entidad, aunque eludió valorar si esta cantidad cumple con los números reivindicados por Castelló y apuntó que todavía ha de ser confirmada por el patronato castellonense. Cabe recordar que los 36 empleados despedidos hace un año tienen pendiente cobrar un tercio de su indemnización al vincularse esta parte a la inyección de Bancaja.

Además de la inversión de Bancaja, los ingresos de Caja Castelló proceden del alquiler de varios inmuebles ubicados la capital de la Plana (Hucha y Casa Abadía), l'Alcora, Morella, Nules, Onda, Vall d'Uixó, Vilavella, Burriana y Vila-real. Caja Castelló impulsa un comedor social en Benicarló, una escuela infantil en Castelló, el centro síndrome de Down de Castelló, el maset Proyecto Amigo y el Hogar de Sant Vicente Ferrer.