Más de 300 chefs profesionales y personalidades del mundo gastronómico de Castelló participaron ayer en la primera jornada del I Congreso de Gastronomía y Vino impulsado por la diputación y el ayuntamiento, en el cual se han dado cita más de una docena de prestigiosos ponentes entre los que destacan 5 chefs galardonados con Estrella Michelin: Ricard Camarena, Bernd Knöller, Kiko Moya, Manuel Alonso y el chef castellonense que ejerce como director técnico del congreso, Miquel Barrera, responsable del restaurante de la Vall d'Alba Cal Paradís.
A las 18.30 horas, uno de los momentos más esperados fue la intervención del chef Bernd Knöller con la ponencia «La mejor cocina valenciana de aquí con un valenciano de allí». Posteriormente, demostraciones culinarias en directo, catas de vinos de Les Useres y espacios de debate (formales e informales) completaron el colorido del evento en el Centro de Desarrollo Turístico de Castelló.
El presidente de la Diputación de Castelló, Javier Moliner, destacó el potencial de Castelló como «la mejor despensa del Mediterráneo» al inaugurar el congreso dirigido por el chef Miguel Barrera, primer castellonense con estrella Michelin y embajador de la marca de productos autóctonos que impulsa la diputación, «Castelló Ruta de Sabor».
En la inauguración del congreso también participaron el alcalde de la ciudad, Alfonso Bataller, el conseller de Turismo, Máximo Buch y la concejala de Turismo de Castelló, Marta Gallén.
Castelló Ruta de Sabor
En su intervención, el presidente Moliner aprovechó para subrayar los beneficios que supone para la provincia el esfuerzo conjunto de vertebrar todo un proyecto de trabajo como Castelló Ruta de Sabor. «Tal y como os puede corroborar su embajador, Miguel Barrera, Castelló Ruta de Sabor es mucho más que una marca para la provincia de Castelló. Es un proyecto conjunto donde ganamos todos: ganan los agricultores, productores y comercializadores con nuevas oportunidades de venta; ganan nuestros profesionales de la gastronomía con un catálogo único de productos autóctonos de calidad; ganan los consumidores facilitándoles la compra de productos de kilómetro 0, y ganan las cadenas de distribución generando valor territorial a su marca».
