Los nuevos inquilinos del Ayuntamiento de Castelló tienen sobre la mesa el último documento de referencia del Consell a la hora de planificar el nuevo Plan General de Ordenación Urbana, que reduce las previsiones de crecimiento residencial del antiguo gobierno del Partido Popular.

Según las conclusiones de la anterior dirección de Evaluación Ambiental, la ciudad ha desarrollado el 20 % de los 10 millones de metros cuadrados de superficie residencial prevista en el PGOU del año 2000, un 18 % del industrial y un 43 % del terciario. La previsión inicial de los munícipes populares era incluir los mismos números que el año 2000, es decir, preveía una expansión residencial de tres millones de metros cuadrados en 20 años cuando desde el año 2000 se han ejecutado dos millones (en pleno boom urbanístico). Por ello recomendó un ajuste de un millón de metros cuadrados en esta previsión.

El actual ejecutivo municipal prevé ahora consolidar la trama urbana y e impulsar la urbanización de los solares del casco urbano frente a grandes desarrollos en la periferia.

De entrada, descarta el polémico plan de actuación integrada de Mestrets. Ya fue anulado por la justicia y el bipartito progresista confirma el fin de uno de los proyectos estrella del PP.