La paralización de las obras de ampliación del Hospital Provincial de Castelló condiciona la prestación del servicio de PET-TAC, una herramienta de diagnóstico del cáncer. La reforma del sótano del centro hospitalario contempla la instalación de los búnqueres donde se emplazará el equipo, pero los trabajos llevan en suspenso desde hace más de dos años. Por ello, el hospital tiene que recurrir a un PET-TAC portátil de una empresa privada, Alliance Medical, que sólo da servicio en Castelló dos días a la semana y cuyo alquiler cuesta 400.000 euros anuales, según la sección sindical de CCOO. Teniendo en cuenta que el contrato se inició en septiembre de 2012, el desembolso de dinero público por este servicio ascendería ya a 1,2 millones de euros.
El aparato está averiado desde hace unas tres semanas, lo que ha obligado a derivar a enfermos de cáncer a Valencia para poder someterse a las pruebas diagnósticas, tal y como avanzó ayer este diario. Uno de los afectados, Raúl Batalla, denunció que le han anulado cuatro citas en el último mes y finalmente tuvo que acudir el pasado miércoles al Hospital Clínico de Valencia para hacerse la prueba. Fuentes del Provincial precisaron que se prevé reanudar el servicio en Castelló esta semana tras revisar la avería.
El problema actual con el PET-TAC pone sobre la mesa la necesidad de contar con un equipo fijo en el hospital que, tal y como estaba previsto, tendría que ubicarse en las futuras dependencias. Sin embargo, la falta de fondos ha ido demorando la segunda fase de las obras de ampliación del Servicio de Medicina Nuclear. En julio del año pasado el Consorcio Hospitalario Provincial de Castelló anunció que en 2015 se reanudaría la actuación con una inversión de 2,5 millones de euros -financiados al 50 por ciento por la Conselleria de Sanidad y la Diputación de Castelló-. Sin embargo, a estas alturas del año aún no se han iniciado los trabajos, pese a que fueron adjudicados el pasado mes de marzo a la empresa Becsa. Según fuentes del centro, están a la espera de permisos pendientes para la obra.
Compra del PET-TAC
Además de completar las instalaciones, el Hospital Provincial tendrá que adquirir también el PET-TAC una vez cuente con el emplazamiento necesario. Según fuentes sindicales, en el año 2011 se adjudicó el servicio a la empresa Siemens por 1,4 millones de euros. Al paralizarse las obras no podía instalarse el aparato y la firma canceló la operación al cabo de dos años.
La actuación que el consorcio prevé reanudar este año contempla la construcción de un pabellón docente y la ampliación del sótano, donde además del PET-TAC se alojará la unidad de tratamiento hiperbárico. Está previsto finalizar la ampliación de las dependencias del Servicio de Medicina Nuclear e instalar allí los equipos actuales de gammacámaras. Finalmente se prevé realizar el revestimiento del edificio docente en fase de construcción.
