La alcaldesa de Cabanes, Estrella Borrás, anunció ayer que ha enviado un comunicado a la entidad Cajamar para reunirse con sus responsables «tras tener conocimiento de que pretenden cerrar su oficina bancaria en el núcleo de la Venta San Antonio-Estación de la Ribera». El PSPV solicitó también un encuentro con el banco y Units pedirá que el consistorio deje de trabajar con ellos si cierran la sucursal. Este diario intentó ayer contactar sin éxito con Cajamar para conocer su posición sobre la situación de la sucursal de la Ribera.

Borrás instará a mantener abierta la oficina de este núcleo en el que residen «personas de avanzada edad con escasas posibilidades de movilidad a otras poblaciones, que precisan habitualmente de servicios bancarios». Estrella Borrás afirmó que, «a veces se toman decisiones, por parte de organismos o empresas tanto públicas como privadas, que no tienen en cuenta el trastorno que pueden ocasionar en el día a día de las personas y solo se guían por la cuenta de resultados».

Según la alcaldesa, «tratar de eliminar una asistencia esencial para los establecimientos y los vecinos es quitarle algo que mantiene a la Ribera con vida».

Borrás se reunió ayer junto con el concejal responsable de la Ribera Javier Llorens y diferentes asociaciones para buscar una salida a esta decisión que consideran «tan injusta». En la Ribera, pedanía ubicada cerca de la zona de campings y apartamentos de Torre la Sal, habitan unas 700 personas. La sucursal abre actualmente los martes y los jueves y cuenta con un cajero automático exterior. La portavoz municipal y diputada provincial del PSPV, Virginia Martí, ha pedido también una reunión con los responsables de la entidad. «Intentaremos evitar por todos los medios el cierre de la oficina y apoyaremos a los vecinos en las medidas que puedan tomar para dar solución a esta situación». Los socialistas consideran que cerrar la sucursal «ocasionará muchas molestias. Con que esté abierta dos días es suficiente para los vecinos». Units pel Poble-Compromís avanzó que pedirán en una moción exigir al consistorio que «deje de trabajar con la entidad si materializa el cierre».