Perder durante dos partidos al jugador más importante de la plantilla tanto dentro como fuera del campo es duro, pero sustituirlo es aún más complicado. Sin embargo, Tomás Pina y Manu Trigueros han conseguido no recordar al capitán Bruno Soriano en lso dos últimos partidos ante el Granada y Espanyol, ambos saldados con victoria.

Pina, incluso mermado por unos problemas en los dedos de los pies, fue sin duda el mejor del equipo en Los Cármenes, sobre todo en la función e stopper. Y mientras él cortaba balones, su compañero en el doble pivote, Manu Trigueros, quedaba libre para irse al ataque, de ahí que diera una asistencia y marcase un gol ante el Granada. «Estoy muy contento por marcar, ya dije que también quiero meter goles este año y ayudar al equipo. Mi tarea es más de dar pases a los delanteros y que ellos finalicen, pero si puedo ayudar al equipo en forma de gol es un punto positivo de cara al futuro», señaló.

Trigueros aseguró que los amarillos se llevaron los tres puntos en un partido que dominaron casi desde el principio. «Fue un partido muy sufrido, sobre todo en la primera parte. Sabíamos que ellos iban a empezar con mucha intensidad y así fue. En los primeros diez minutos nos metieron en nuestra área, pero a partir de ahí nosotros empezamos a dominar el encuentro aunque sin ocasiones de peligro, pero sí llegando al área. La segunda parte hicimos dos presiones muy buenas que al final nos dieron los tres puntos».

Ilusionados

Al centrocampista no le asusta la oleada de partidos que les espera. «En Liga viene primero el Athletic, que será un rival directo por la clasificación. Será un partido duro en el que tengamos que tener cuidado con el balón parado. Luego tendremos otra salida difícil, la del Málaga, y luego ya el Atlético de Madrid. En la Europa League intentaremos ganar para seguir tranquilos y felices de estar en la competición».