La unidad de respiro para familiares de enfermos de Alzheimer de Almassora estará lista la primera semana de diciembre. Los técnicos han confirmado que el grueso de la reforma en la Casa de la Ermitana, en el paraje de Santa Quitèria, ya está ejecutado, a la espera de instalar el ascensor y las puertas y grifería.

La empresa suministradora informó que el elevador llegará al edificio en unos días para poder ponerlo en marcha coincidiendo con la apertura al público del bloque. Por otro lado, los técnicos han confirmado el fin de las obras relativas al alicatado, los baños y las instalaciones de tuberías, conductos eléctricos y climatización.

En las próximas semanas también está prevista la construcción de falsos techos para tapar el cableado del edificio, así como la instalación de la grifería en los baños y la carpintería del bloque. La pintura de las dependencias completará la intervención en la Casa de la Ermitana, que quedará totalmente renovada a la espera de que el Ayuntamiento de Almassora adjudique la gestión del centro y éste inicie su actividad con familiares de enfermos de Alzheimer y demencia senil. Y es que una vez finalizada la obra, se dará paso al concurso público para adjudicar la gestión del local. A este respecto, los Servicios Sociales del ayuntamiento ya están trabajando en la elaboración del pliego técnico.

El proyecto de la obra también incluye la instalación de una plataforma elevadora que permitirá salvar los escalones existentes en el medio del pasillo, así como una rampa en la puerta de acceso.

Los técnicos municipales han recordado que, al tratarse de un edificio histórico, el proyecto ha sido muy riguroso en cuanto al respeto a la fachada original y la estructura interior. El estudio ha optado por soluciones alternativas para adaptarse al espacio y evitar agresiones al diseño inicial

La actuación en estas dependencias anexas a la ermita de Santa Quitèria está valorada en 65.000 euros, más 20.500 euros en mobiliario.