La asamblea de Castelló en Moviment dio ayer permiso a sus cuatro concejales en el ayuntamiento para que voten a favor de los presupuestos municipales de 2016, con lo que el equipo de gobierno bipartito tiene garantizados apoyos suficientes para sacar adelante las cuentas.
Tras semanas de negociaciones, el grupo municipal de Castelló en Moviment llegó a un principio de acuerdo con el ejecutivo local sobre el presupuesto. Todo a expensas del dictamen de la asamblea ciudadana de la formación, que somete a sus bases todas las decisiones de calado. La reunión se celebró ayer por la tarde y no hubo sorpresa, ya que la militancia dio el visto bueno a las cuentas municipales del próximo año. El portavoz de Castelló en Moviment, Xavi del Señor, destacó que el presupuesto del ayuntamiento sigue la línea del documento programático suscrito entre su formación, el PSPV y Compromís y que posibilitó el pacto de gobierno. Pese a ser «de transición», señaló, «deja de lado las grandes obras que no eran de interés para la ciudadanía y sienta las bases para que vayamos hacia una ciudad más sostenible y preocupada por su gente».
Según dijo, los presupuestos priman los servicios sociales (más allá de las ayudas de emergencia), las actuaciones medioambientales y culturales, así como las políticas de empleo. Del Señor destacó que recogen también la elaboración de un plan estratégico que definirá el modelo de ciudad por el que se va a apostar.
Con el apoyo de Castelló en Moviment, el gobierno de Amparo Marco podrá sacar adelante los presupuestos de 2016. De no lograr los apoyos, tendrían que prorrogarse los del presente ejercicio, elaborados por el anterior ejecutivo del PP.
Presupuesto social
El equipo de gobierno municipal no ha desvelado el contenido del presupuesto al encontrarse en proceso de negociación. Sólo se apunta que los ingresos serán similares a los de 2015, rondando de 160 millones de euros. El margen de los concejales del PSPV y Compromís también estará condicionado por los contratos con pagos plurianuales adjudicados por el gobierno de Alfonso Bataller. El ayuntamiento dispondrá de unos 30 millones para ejecutar proyectos propios. Al respecto, el esfuerzo principal se quiere acometer en el área de bienestar social. Las ayudas de emergencia social rondarán los dos millones de euros y, por primera vez, habrá presupuesto para pobreza energética.
