Estudiar no una es tarea fácil, y tú lo sabes. Tu cuarto está invadido de pilas de libros, folios y agendas, y tus paredes parecen un puzzle de post-its de colores. Sin embargo, un pequeño infiltrado se ha ido incorporando poco a poco, casi sin que te dieras cuenta, en tus hábitos de estudio: tu smartphone.
Según el último informe de la Sociedad de la Información de Fundación Telefónica, en 2014 un 20,2% de los usuarios de Internet accedían a este servicio a través de sus móviles. La información ahora está al alcance de tu mano, en cualquier sitio y momento. Así lo evidencia la Encuesta sobre Equipamiento y Uso de Tecnologías de la Información y Comunicación en los Hogares 2014, del Instituto Nacional de Estadística. Más del 80% de los encuestados habrían accedido a Internet fuera de su casa o trabajo, y el 77,1% habrían utilizado sus móviles para ello.
Los smartphones han llegado a nuestras vidas para quedarse. No podemos pasar por alto el gran número de aplicaciones móviles que han ido surgiendo durante estos últimos años, tan variadas como útiles en muchos de nuestros quehaceres cotidianos. ¿Por qué no aprovecharlas para mejorar en tus estudios?
Se acabó perder el tiempo
Te sientas en tu escritorio, dispuesto a aprenderte ese examen que tanto te preocupa. Sin embargo, notificaciones y alertas de servicios de mensajería instantánea y redes sociales invaden tu smartphone, desconcentrándote por completo.
Es complicado no sucumbir a la llamada de Facebook o Whatsapp, y para ayudarte existen apps encargadas de bloquear aquellas distracciones que tú elijas, prohibiéndote acceder a estas durante el periodo de tiempo que determines. Así, podrás centrarte en lo realmente importante: estudiar.
Cuándo y dónde quieras
Los espacios de almacenamiento en Internet cada vez son más populares. Según la encuesta del INE anteriormente mencionada, el 30,9% de los usuarios de Internet habían utilizado este servicio en los tres últimos meses para fines privados.
Ahora puedes acceder a todos los documentos almacenados en la nube desde cualquier dispositivo, incluido tu smartphone, e incluso guardar páginas web útiles para consultarlas posteriormente. En muchos casos, ni siquiera es necesario tener conexión a Internet.
Para los más despistados
Organizarse puede ser complicado. Más aún cuando tu horario cambia cada semana, o cuando has de entregar varios trabajos en fechas muy próxima. Existen muchas aplicaciones con interfaces cómodas e intuitivas para programar tus horarios, apuntar tus tareas y priorizar entre ellas. También puedes programar las horas que has de dedicar a cada una de ellas. Gestión y eficiencia en la palma de tu mano.
Tu mochila nunca pesó tan poco
Según la séptima edición del informe «La Sociedad en Red», elaborado por el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad Informacional, el smartphone es el dispositivo que más crece a nivel de equipamiento individual. Más de la mitad de la población mundial tiene uno.
Así pues, ya no hace falta llevar mochilas atestadas de libros y apuntes. Con el móvil puedes leer archivos en cualquier formato, añadir notas y marcadores, descargar libros de Internet o adaptar la letra e iluminación para tu mayor comodidad.
Cuando leer no es suficiente
Tal y como indica la encuesta realizada por el Grupo de Investigación en Computación Pervasiva (PERCOMP) de la Universidad de Valladolid, la mitad de los alumnos utilizan smartphones para estudiar. Además, no solo se consultan libros. Mapas visuales, resúmenes y esquemas son el pan de cada día de los estudiantes.
Con un móvil, además de eso, es posible elaborar documentos de manera colaborativa y a distancia, o confeccionar tus propios test para repasar. ¿Quién dijo que el papel era imprescindible?
