El Consell Agrari Municipal de Almassora suma una nueva oferta formativa de cara al próximo año con la creación de un Banco de Tierra para el que ya se han aprobado las bases rectoras. El principal objetivo de la recuperación de una iniciativa que estaba anclada y sin desarrollo es la reutilización de diferentes parcelas del término municipal para «garantizar la continuidad de la actividad agraria en el municipio y, a la vez, ofrecer una formación agrícola que se convierta en un recurso laboral para algunos sectores de la población». La iniciativa se centra en la cesión de terrenos por parte de los propietarios para que más tarde puedan ser alquiladas y explotadas por los interesados en el proyecto. El consistorio creará un registro de parcelas disponibles y gestionará la intermediación de los propietarios y los agricultores que actúen como arrendatarios. La intención es ampliar sus capacidades para la formación de desempleados o personas en riesgo de exclusión social.