Las elecciones generales pusieron fin ayer en la capital de la Plana a un ciclo político que más o menos se venía manteniendo sin apenas cambios desde los inicios de la actual democracia. El Partido Popular repitió como primera fuerza en Castelló pero dijo adiós a su condición hegemónica. Perdió cerca de 15.000 votos y cosechó un 29 % de apoyos frente al 50 % de 2011. En el lado progresista, la coalición de Compromís-Podem se colocó en segundo lugar y dio el sorpasso al Partido Socialista, que por primera vez en la historia retrocedió a la tercera posición con sólo un 19 %.

Los resultados reforzaron en Castelló un mapa político diverso que ya se inicio en los comicios municipales del 24 de mayo. El bipartidismo del PP y PSOE dejó ayer de acaparar las preferencias de los castellonenses y ambos partidos no alcanzaron la mitad de los escrutinios, cuando en 2011 rozaron el 70 %. Los populares recuperan cuatro puntos respecto a las locales de mayo (26 %), pero se quedan, con 26.088 votantes, muy lejos de los 41.000 de 2011.

La sorpresa de la noche se produjo en el frente de izquierdas. Compromís-Podem dio la campanada y con un 26 % de electores superó a los socialistas. Cuatro años atrás, Compromís, que se presentaba junto a Equo (Podemos no existía), obtuvo en la capital 3.793 votos; ayer, 23.084. El PSOE bajó del 28 % de 2011 al 19 %. En las municipales, la suma de Compromís y Castelló en Moviment (agrupación de electores alentada por Podemos, entre otros actores,) también quedó por encima de los socialistas, pero cada formación se presentó por separado y así quedaron por detrás.

El Partido Socialista sufrió en la capital de la Plana el peor resultado de la historia democrática. Ya hace cuatro años registró unos pésimos números en comparación a 2008. Buena parte de su electorado de Castelló no le perdona todavía la gestión en la crisis económica del expresidente del Gobierno, Jose Luis Rodríguez Zapatero, y optó por opciones que considera más frescas como la de Compromís-Podemos. Asimismo, en el bloque progresista, los castellonenses obviaron a EU-Unitat Popular, que únicamente consiguió un 3 % de votos frente al 5 % de 2011.

Ciudadanos se estrena en las generales con fuerza en Castelló con un 18, 4 % de respaldos. Mejora los resultados del 24 de mayo y se sitúa a 707 votos del PSOE, aunque se ha visto sobrepasado por sus antagonistas de Compromís-Podemos. UPyD desaparece del mapa con un 0,77% de respaldos tras el 6,52 % de 2011.

Si se trasladaran los resultados de las generales a las municipales, el PP y Ciudadanos lograrían más votos que el PSPV, Compromís y Podemos y podrían alcanzar la alcaldía. Con los datos de ayer, PP y Ciudadanos ganarían un edil cada uno (hasta 9 y 5 respectivamente) y llegarían a los 14 de la mayoría absoluta. Compromís y Podemos repetirían los ocho actuales y el PSOE perdería dos (de 7 a 5 ). No obstante, cabe tener en cuenta que dichas elecciones se mueven en variables distintas. Asimismo, Compromís y Podemos (con Castelló en Moviment) obtuvieron solos más votos el 24M (un 28 % sumandos los dos) que ayer.

El PSOE en la ciudad fue el gran derrotado en la cita electoral. Los populares también salieron esquilmados pero pueden presumir de que continúan siendo el partido más votado.