Gala, la perra policía de Onda, está embarazada. La agente K-9 paseó ayer una barriga más pronunciada de la habitual durante la exhibición de unidades caninas que acogió la Secció del IES Serra d'Espadà.

Esta es una gran noticia para el cuerpo de seguridad local, y es que uno de los cachorros pasará a formar parte de la plantilla.

El padre del futuro o la futura agente de la Policía Local también estaba en la exhibición. Este pastor alemán responde al nombre de Bingo, aunque más que suerte, fueron sus cualidades las que le convirtieron en su progenitor. «Tiene 7 años y es el mejor que tenemos», según declaró ayer un policía ante el alumnado que miraba expectante al perro, poco antes de que el can se abalanzara contra un supuesto delincuente que había disparado una pistola de fogueo.

Gala estuvo presente en la exhibición. Su compañero, David Hernández, presentó a K-9 al alumnado de la Secció, pero la perra guardó reposo durante las diferentes actividades programadas, ya que su parto se prevé para dentro de 10 o 20 días.

La Policía Local enseñó a los alumnos en la pista de fútbol sala los principales objetivos de las unidades caninas, como por ejemplo el cumplimiento de las ordenanzas, la detección de drogas y otras cuestiones relacionadas con la seguridad. Además, los agentes también desmontaron algunas de las leyendas urbanas que rodean el adiestramiento canino policial. «No drogamos a los perros, simplemente jugamos mucho con ellos y les damos premios». Y como muestra, varios ejemplos que interpretaron ayer.

Los agentes dan el alto a un coche. -¿Llevan algo? -No. -Claro, bajen del coche. Los ocupantes del vehículo (la mayoría profesores voluntarios) son colocados en fila, a una distancia considerable uno de otros, para que los perros puedan olfatearlos. Lo hacen. Uno de los perros toca un bolsillo con el hocico, se sienta y recibe un premio. La Policía ya sabe dónde está la droga.

En otra ocasión, un ocupante se altera, y su nerviosismo va en aumento conforme pasan los segundos, hasta que al final intenta agredir al policía. El perro, que lo ve desde una distancia de tres metros y con un bozal de metal puesto, acude inmediatamente al rescate y consigue tumbar al agresor. El can también recibe su recompensa gracias al buen trabajo realizado.

El alumnado del instituto disfrutó ayer de todas estas exhibiciones que formaban parte de la jornada previa de la Navidad de la Secció de l'IES Serra d'Espadà, que se marcha con la lección bien aprendida para estas fiestas y sabiendo el gran trabajo de los canes.