Las obras de restauración que se están llevando a cabo en la ermita de San Antonio Abad, en el municipio de Villahermosa del Río, han sacado al descubierto unas pinturas que datan de los siglos XIV-XV de gran valor y calidad artística.

Existen pocos hallazgos como el que ha tenido lugar en la localidad de la comarca del Alto Mijares en todo el territorio valenciano, bien por su interés como por su dimensión y es por ello que estas pinturas se pueden enmarcar entre los grandes descubrimientos recientes.

El reciente descubrimiento fue el motivo de la visita a Villahermosa del Río por parte de técnicos de los servicios territoriales de Castelló de la Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte. El objetivo del viaje al municipio fue el de conocer el estado en que se encuentran las pinturas, las cuales están ubicadas en el cuarto tramo de la ermita de San Antonio Abad.

Las obras encontradas siguen los parámetros del período del gótico lineal, una tipología de pintura que refleja especialmente dibujos claros y precisos en la obra y otros elementos plásticos como la luz y el espacio. Además, existe en las pinturas un predominio claro de la línea que resalta el contorno de las figuras, que tienen en general poco volumen y perspectiva.

En cuanto al significado de las obras halladas en Villahermosa del Río, las pinturas muestran tres escenas de las que la principal, que es la central, parece dedicada a San Cristóbal, que cruza un río con los pies desnudo. El resto de imágenes están todavía en estudio para saber las advocaciones que representan. La expresión de San Cristóbal es de gran efecto y el tratamiento es naturalista.

Ermita de San Antonio Abad

San Antonio Abad es el nombre de la ermita protogótica medieval de planta rectangular que se encuentra ubicada en el municipio de Villahermosa del Río y que en la actualidad se está trabajando en su restauración. Por sus características arquitectónicas, el edificio es un exponente representativo de las iglesias construidas con arcos diafragma y cubiertas de madera.

La portada principal de la ermita es lateral y está situada en el cuarto tramo y, además, está formada por un arco de medio punto. Tanto la portada como los arcos de los primeros tramos indican que la ermita fue construida en el siglo XIII, alrededor de cien años antes de la fecha en la que podrían datar las pinturas encontradas recientemente.

A lo largo del muro en el que se sitúa la entrada lateral de san Antonio Abad hay un espacio formado por una galería de porches desde donde se puede contemplar una vista panorámica del municipio y su entorno.