La federación de ampas FAPA Castelló-Penyagolosa pidió ayer a la Conselleria de Educación que ajuste la normativa de comedores escolares a las necesidades de las escuelas rurales. «El problema es que la legislación establece requisitos de funcionamiento basados en las características de centros ubicados en entornos urbanos, con un mínimo de 100 comensales, que son la mayoría de los centros valencianos, pero no tiene en cuenta la situación de las escuelas de las zonas rurales con menos densidad de población», explicó ayer el colectivo tras la reunión mantenida con el director territorial de Educación, Robert Roig.

Los requisitos contemplados en la actualidad hacen referencia a los precios máximos de los menús o a los cargos asociados al servicio «que generan gastos que no son asumibles si el comedor escolar cuenta con menos de 25 o 50 comensales», advirtió la federación. La normativa contempla un precio máximo de 4,25 euros por comensal y establece, necesariamente, «habilitar figuras como la del director o directora del centro, el encargado o encargada del comedor y monitores o monitoras del servicio que requieren un sueldo asociado que no se puede pagar con los ingresos que generan los y las usuarias del servicio», recalcó la entidad. Es por eso que mientras en las ciudades con más población los comedores escolares suelen contar con superávit, en las zonas menos pobladas son deficitarios.

Para dar solución a este problemas, FAPA planteó ayer adaptar la normativa a las necesidades de los centros con menos alumnado, subvencionar parte del servicio, o racionalizar los recursos humanos para la organización del comedor, adaptándolo al número de comensales, y suprimiendo las figuras asociadas al servicio para reducir los gastos.

Por otra parte, en referencia al mantenimiento y los problemas en las infraestructuras educativas de la provincia de Castelló, Roig explicó que está prevista la publicación de la relación de centros que se licitarán este año. En este sentido, el director territorial aseguró que se ha priorizado la actuación en determinantes centros por criterios técnicos. Asimismo, también se trataron los problemas de mantenimiento del CEIP Carles Sarthou de Vila-real y del CEIP Vicent Marçà de Castelló.