El Villarreal C se mantiene como el equipo más complicado de batir para los rivales. De hecho, la joven escuadra que entrena Carlos Pérez Salvachúa ha conseguido arrancar dos empates en las dos últimas salidas ante el Crevillente y el Muro. La escuadra vila-realense solo ha perdido en dos de los 22 partidos que ha disputado. Ambos fueron lejos de casa. Además, con doce empates es, con diferencia, el equipo que más tablas ha firmado hasta la fecha.

En casa nadie ha sorprendido al segundo filial del Villarreal. Sus once encuentros se saldaron con cinco victorias y seis empates. Y sus once salidas se saldaron con tres triunfos, seis empates y solo dos derrotas (ante el Novelda, 2-0; y el Borriol, 2-1). Estos números tan equilibrados le mantienen quinto en la tabla, a tres puntos del Castellón.