La consellera de Sanidad Universal y Salud Pública, Carmen Montón, defendió ayer «los buenos resultados» que está obteniendo el programa de vacunación contra la tosferina que se aplica desde 2015 a todas las embarazadas en la Comunitat Valenciana y señaló que la muerte de un bebé en Castelló es un caso «desgraciado» y «excepcional».

La titular de Sanidad realizó estas declaraciones en la presentación del Plan de Igualdad de su departamento a preguntas de los medios sobre el fallecimiento en Castelló de un bebé de un mes a causa de esta enfermedad. Al respecto, la consellera comentó que se trata de un caso «excepcional», ya que «la madre estaba vacunada».

Montón explicó que «la comunidad científica sabe que esta vacuna tiene un porcentaje muy bajo en el que puede no ser efectiva» y que «desgraciadamente, ha ocurrido en Castelló».

La consellera, que expresó sus condolencias a la familia, destacó, por otro lado, que «la Comunitat lo está haciendo bien» en la lucha contra esta afección porque «se está vacunando desde enero de 2015 a todas las mujeres embarazadas».

A preguntas de los periodistas, Montón negó que se vaya a iniciar una investigación sobre el caso y destacó que «no se pueden cambiar los procedimientos» de esta vacuna. «Es un caso excepcional porque la madre estaba vacunada y porque desde enero de 2015 se está vacunando a todas las mujeres embarazadas con buenos resultados», insistió.

Fiscalía

Por su parte, la asociación del Defensor del Paciente ha remitido al fiscal jefe de Castelló la información sobre el fallecimiento del recién nacido por si hubiera podido producirse «algo irregular, o bien al vacunar tarde a la madre o bien no haber tratado a tiempo al bebé», señaló ayer este colectivo en un comunicado. Por ello, solicita «una investigación que pueda dar luz a lo sucedido».

La Conselleria informó el pasado jueves de que la madre había sido correctamente vacunada en la semana 26 de embarazo.