El Villarreal camina con paso firme hacia el título de Liga en División de Honor juvenil. Tiene más cerca revalidar el campeonato tras ganar ayer al Roda en el duelo de rivalidad provincial que tuvo claro color amarillo. El encuentro llegó al descanso con los puntos ya decididos (2-0). Fue un monólogo de la escuadra local ante un trabajador conjunto gualdinegro al que le vino grande el Mini Estadi. Los goles de Darío Poveda y de Vicent Abaso, en propia portería, dejaron el duelo decantado en el intermedio. Eso sí, con el 3-0 los amarillos se relajaron y el Roda se acercó al 3-2.

Dominó mucho el equipo de Javi Calleja. Bien llevado por Pablo Álvarez y Sergio Lozano, buscó las bandas (Chuca y Akale) en busca de los grandes artilleros (Darío Poveda y Dani Villanueva). Fue el máximo goleador de la categoría, el alicantino Darío, el que dio el primer aviso (min. 19), pero se la paró Josele. Y superada la media hora de juego el propio Darío puso el 1-0, tras jugada de Akale. Pudo empatar Dani Liñares en el 40, pero lanzó alto. Y pasando un minuto de la hora el trallazo de Pablo Álvarez golpeó en la espalda de Vicent Abaso y el balón acabó besando las mallas: 2-0.

A los once minutos de la reanudación llegó el gol de la sentencia. Lo anotó el máximo realizador, Darío, de fuerte chut ajustado al palo. El duelo quedó visto para sentencia, aunque el equipo de Calleja se relajó y en el minuto 86 se puso un inquietante 3-2.