Los técnicos de carreteras de la Diputación de Castelló visitaron ayer el tramo de obras de ensanche la CV-213, propiedad de la entidad provincial, que une la rotonda de entrada de la A-23 con el municipio de Navajas, para comprobar «in situ» la paralización de las mismas por parte de la empresa constructora.

Desde diputación se requirió a ACTIA Soluciones, la constructora a la que se le adjudicó la obra, los motivos oficiales de esta paralización de obras que debían haber continuado el pasado cinco de abril tras Semana Santa. Sin embargo, al parecer, la situación en la que se encuentra la empresa, supuestamente en un expediente de regulación de empleo, habría llevado a la constructora a dejar sin acabar el poco más de un kilómetro de vial que se estaba adecuando. Desde la diputación informaron al equipo de gobierno que se procederá a arreglar los arcenes para que haya un metro entre la carretera y la obra y poder desplazar las vallas hacia atrás hasta su nueva reanudación. La intervención, que comenzó a ejecutarse hace poco más de mes y medio, por un total de 1.2 millones de euros para dos tramos de actuación: el primero de 1,150 metros desde la rotonda de entrada de la A-23 hasta el camping municipal de Navajas y el segundo tramo para arreglar un trozo de curvas que discurre desde Matet a Algimia. La actuación se empezó a ejecutar tras la expropiación de los terrenos por un valor de 40.000 ?.

El concejal de urbanismo, Francisco Rosalén, fue el encargado de comunicar a la entidad provincial la paralización de la obra. Rosalén instó a diputación a que actúe cuanto antes ya que, según comunicaron desde la entidad, la situación podría alargarse un tiempo aproximado de 6 a 7 meses.