Por un día, Castelló se transformó en la isla griega de Lesbos y comprobó la preparación de los equipos de emergencia en el caso de una masiva llegada de refugiados. Cruz Roja organizó en un simulacro un campo de refugiados en Castelló, en el que participaron más de un centenar de personas entre alumnos, voluntarios y figurantes procedentes de las tres provincias de la Comunitat Valenciana.

El campamento de refugiados, que se instaló en la explanada del Palau de la Festa desde las nueve de la mañana a las seis de la tarde, se dividió en tres módulos -albergue, salud y psicosocial-. Hubo personal de emergencias de la Cruz Roja con chalecos con los emblemas de la institución en los países occidentes (Cruz Roja ) y en los musulmanes (Media Luna Roja). También hubo presencia de una patrulla militares y hubo incluso un grupo con pancartas reivindicativa. Los viandantes del entorno miraban sorprendidos este ejercicio, cuando esta realidad se produce cada día en un país cercano de la Unión Europea como Grecia.

Desde Cruz Roja Castelló explicaron que se trata de un «gran despliegue», organizado por el departamento de Cooperación Internacional de Cruz Roja Española, para mejorar su intervención ante una posible emergencia y comprobar la coordinación entre todos los agentes que intervienen en cualquier catástrofe: Cooperación, Socorros y Emergencias, Cruz Roja Juventud e Intervención social. Un ejercicio similar se realizó el pasado año en Alicante, con el ébola como foco de atención. En esta ocasión, el simulacro se ha centrado en la atención a la población refugiada, la principal tragedia humanitaria que afronta ahora Europa.

Así, a lo largo de la jornada se resolvieron diferentes situaciones como el registro y recepción de refugiados; la valoración sobre el grado de vulnerabilidad; la atención tanto sanitaria como psicosocial; el reparto de alimentos y la resolución de posibles conflictos, asaltos o atención a personas heridas.

Cruz Roja Española viene trabajando con personal refugiado desde hace muchos años, pero en estos momentos ha atendido a más de 17.200 personas refugiadas y migrantes en Grecia a través de los equipos de salud, desplegados en el país heleno, para hacer frente a la crisis de refugiados.

De la Comunitat Valenciana participaron 5 delegados desde el inicio de la crisis. En el mes de marzo, desde el Centro Logístico de Emergencias Internacionales, en Cabanes, se efectuó un envío de ayuda humanitaria a Siria, consistente en 792 kits de alimentos, para atender las necesidades de cerca de 4.000 personas.