PP y PSOE protagonizaron ayer una nueva entrega de su serial preelectoral que tiene como hilo conductor la sanidad. Los populares en la diputación criticaron que los socialistas no respalden su declaración institucional instando a la Generalitat a mantener una asistencia sanitaria de calidad en Castelló. Por su parte, el PSOE acusó al PP de utilizar la sanidad pública como instrumento de confrontación política frente al gobierno de la Generalitat.

El vicepresidente y portavoz del gobierno de la diputación, Vicent Sales, dijo no entender «cómo el PSOE antepone sus intereses de partido y defender a su consellera antes que defender los intereses de los ciudadanos de Castelló por mantener los mejores servicios sanitarios en la provincia respaldando esta iniciativa vecinal. Su postura no va a impedir que el gobierno provincial reivindique los intereses de los castellonenses ante un Consell que pretende llevarse a Valencia servicios básicos para la provincia de Castelló».

Sales recalcó que el texto de la moción registrada ayer «recoge literalmente el contenido del comunicado emitido por las distintas federaciones vecinales el sábado, y que dirigieron a todos los grupos políticos con representación en la diputación». Un comunicado que está rubricado por los tres presidentes de las federaciones vecinales: la Coordinadora de Entidades Ciudadanas de Castelló, la Federación de Asociaciones Ciudadanas, Consumidores y Usuarios de Castelló y la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos.

El nuevo director territoral de Presidència de la Generalitat en Castelló, Adolf Sanmartín, consideró «que la estrategia del PP de utilizar la sanidad pública como instrumento de confrontación política frente al gobierno de la Generalitat muestra la imagen más denigrante y perversa del PP de Castelló. Tan pocos argumentos le quedan ya al Partido Popular que incluso ha optado por manipular a determinadas asociaciones ciudadanas, o mejor dicho a determinados dirigentes afines, para utilizarlos como columna de choque contra el Consell».

Sanmartín manifestó que «no hay ningún proceso centralizador en la sanidad pública sino la voluntad del Consell de optimizar los recursos para garantizar un mejor servicio a los ciudadanos. Así ha sido con la adquisición del acelerador lineal para el Hospital Provincial que finalmente ha tenido que pagar la Conselleria de Sanitat en su totalidad porque Moliner no ha aportado ni un sólo euro».

Respecto al futuro del Centro de Transfusiones de Castelló, afirmó que «es rotundamente falso que se vaya a cerrar. El anterior banco de sangre que allí existía se transforma en cinco bancos de sangre ubicados en cada uno de los hospitales para garantizar un mejor servicio».

Sanmartín también manifestó que los CICU «se van a mantener en Castelló y Alicante tal como están en la actualidad. Se puede decir más alto pero no más claro y por mucho que Moliner y el PP repitan una y mil veces una mentira, ésta no se convierte en una verdad».