La última jornada de Liga en el grupo I de Regional Preferente finalizará el domingo y casi todo está decidido. Por arriba está claro con Segorbe, Almazora y Burriana clasificados para luchar por el ascenso a Tercera División, mientras que por abajo está por decidirse una de las tres plazas de descenso a Primera Regional. Con el adiós del Vinaròs y del Cullera, ahora Benicasim y Alcalà (38) y Alqueries (36) afrontarán una tarde de alta emoción. Los tres partidos se jugarán en horario unificado: domingo a las 18.00 horas.
Benicasim y Alcalà jugarán lejos de sus campos y solo el Alqueries jugará como local. Los alquerienses de Basilio López jugarán en su campo contra un correoso Castellón B de Fernando Campos que no se juega nada en esta última jornada. Los gualdiazules intentarán aprovechar el factor campo y el hecho de que su rival llegará sin ninguna opción.
Luego están benicenses y xivertenses que se lo jugarán todo lejos de sus campos. El Benicasim jugará en La Serratella ante un Onda sin opciones. Duro rival para el equipo de la Plana Alta. Y el Alcalà se enfrentará contra un Vall de Uxó herido en el orgullo por los varapalos sufridos en las últimas semanas que le dejaron sin posibilidades de pelear por estar entre los cuatro primeros. Los valleros andan más pendientes en la planificación de su próximo proyecto que en otra cosa, sabiendo que su técnico Paco Sáiz no continuará en el cargo.
Desde hace varias semanas tanto el Cullera como el Vinaròs son equipos de Primera Regional. Lo han pasado muy mal, hasta el extremo de tener que renunciar a jugar uno de sus últimos partidos. Hace dos semanas el Vinaròs no acudió a jugar a Cullera y el pasado fin de semana el Cullera no se presentó a jugar en el campo del Club la Vall.
En el caso del Vinaròs, cerró una nefasta campaña en lo deportivo, pero encomiable en lo referente a al trabajo y el sacrificio hecho por la directiva y en especial por el cuerpo técnico y los futbolistas que no han jugado toda la temporada sin cobrar ni un euro.
