El president de la Generalitat y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, aseguró ayer que es «incomprensible» que el PP haya «abandonado» absolutamente el Corredor Mediterráneo «a su suerte», pues por esta infraestructura pasan más del 50 por ciento de las exportaciones de España y es «fundamental» para el desarrollo de todo el país.
Puig realizó estas declaraciones ante los medios antes de participar en un acto de campaña del PSOE en Castelló, junto al alcalde de Tarragona, Josep Félix Ballesteros, y la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, entre otros.
Así, el jefe del Consell explicó que esta infraestructura «no es un tema fundamental sólo para la Comunitat Valenciana, Cataluña, Murcia o Andalucía, sino para España y es prioritaria para la Unión Europea». «Para el único que no es prioritario el Corredor Mediterráneo es para el PP y el Gobierno de España», lamentó.
Puig destacó que hasta ayer mismo la UE ha mostrado su «sorpresa» por la «nula actividad» en favor del Corredor Mediterráneo por parte del Gobierno de España, por lo que dijo que en el acto de ayer, junto al alcalde de Tarragona, quieren reflejar «esa unión por una infraestructura que generará miles y miles de puestos de trabajo, que acercaría todos nuestros productos a lo que significa un centro neurálgico, que es el centro de Europa».
Por lo tanto, insistió Puig, es «exigible» que cambie la actitud del Gobierno, «y para eso pensamos que lo que hay que cambiar es el Gobierno, puesto que la actitud ya sabemos que no va a cambiar».
Gobierno de progreso
«Hay que hacer un Gobierno de progreso, cohesionado y fuerte, que entienda nuestros problemas y que apoye la mayoría de progreso para el crecimiento y conseguir la redistribución de la renta», explicó Puig. Al respecto, subrayó que desde el Gobierno valenciano están «empeñados» en poner permanentemente en la agenda esta cuestión, «que también es fundamental para el desarrollo de una provincia como Castelló, pues es una de las más exportadoras de España». Lamentó que «ni alargando el plazo de las elecciones seis meses han tenido tiempo para cumplir la promesa electoral de que llegara el AVE».
