Tras el inicio de la aplicación de la regulación de la ocupación en la vía pública en el núcleo suburbano, el equipo de gobierno someterá a debate plenario la próxima semana una nueva ordenanza que regulará la carga y descarga de materiales en la vía pública de la localidad, entre otros aspectos.
La nueva ordenanza contemplará algunos factores, como que el transporte y distribución de mercancías en el entorno urbano, así como el suministro de materiales para las obras de construcción, son actividades básicas y necesarias inherentes al desarrollo comercial y económico de la ciudad. Como apuntó el edil del área, Romualdo Forner , «requieren la existencia o reserva de espacios en las vía pública para la carga y descarga».
Estas actividades deben hacerse compatibles, «necesariamente», con el tránsito rodado y peatonal, a fin de evitar dificultades insuperables o situaciones de riesgo para el normal desarrollo de las personas y vehículos por las calles de la ciudad, declaró Forner, algo que requiere «una regulación y establecimiento de criterios concretos que recoge el nuevo documento».
El objeto de esta ordenanza es regular la ejecución de labores de carga y descarga, en la vía pública de toda clase de mercancías, así como el suministro de materiales para las obras de construcción y reparación de inmuebles, según las zonas. Éstas se han concretado en tres entornos distintos: casco antiguo, zona comercial en núcleo urbano y suburbano, y el resto del municipio. La diferencia básica son los horarios, más amplios fuera de la ciudad antigua, así como el tiempo permitido, de 30 minutos para la carga y descarga, frente a los 45 minutos previsto fuera de este entorno protegido. No se verán afectados por esta regulación, por ejemplo, los servicios de transporte público de viajeros.
