El Villarreal C ve cómo se está vaciando la enfermería. Hace una semana contaba con cuatro efectivos en ella y en estos momentos solo queda el centrocampista dolorense Pedro Martínez, que apura la recuperación de la grave lesión de rodilla a la que fue sometido hace ocho meses. Tampoco está habilitado el delantero alicantino Darío Poveda, que este fin de semana cumplirá el cuarto partido de suspensión por la expulsión sufrida contra el Crevillente en el Mini Estadi.

Jugadores como Pablo Álvarez, Víctor Moya Chuca y José Pedro Gil Chepe están recuperados para su entrenador y podrán participar en el partido de rivalidad provincial contra el Segorbe, del domingo a las 12.00 horas en el Mini Estadi. Un partido que podría servir, en caso de ganarse o empatarse, para igualar la mejor racha histórica sin perder del segundo filial amarillo en Tercera División, que está cifrado en doce encuentros consecutivos.