La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Castelló aprobó ayer la revisión de las ordenanzas fiscales para 2017 planteada por los grupos municipales de PSPV-PSOE, Compromís y Castelló en Moviment, integrantes del 'Pacte del Grau', que incluye una bajada del IBI del 5 por ciento. El concejal de Gestión Municipal, Antonio Lorenzo, ha explicado que el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a las familias pasa del 0,7875 al 0,7475 por ciento, «lo que compensa, en cierto grado, el incremento que año tras año sufre este impuesto por la revisión catastral solicitada por el PP».

También se incluye la bajada del tipo de gravamen de rústica en un 25 por ciento. Otra modificación planteada es el incremento del tipo del IBI hasta el 0,85 para el 5 por ciento de los inmuebles de uso no residencial con valores catastrales más altos. Por último, también se aumenta el tipo de gravamen que debe pagar el puerto en un 5,4 por ciento.

La revisión incorpora una modificación de las bonificaciones fiscales a las familias numerosas, que tendrá un carácter más progresivo, al contemplarse tanto el valor catastral del inmueble como la renta. Con respecto al IBI también se ha aprobado una bonificación del 30 % para los inmuebles cuya actividad declarada esté relacionada con la cultura, como una forma de compensar el «elevado IVA cultural establecido por el Gobierno del PP». Se beneficiarán las galerías de arte, librerías, salas de cine, teatros, salas de conciertos e inmuebles destinados a la producción y representación cultural.

También habrá una bonificación del 30 por ciento en el IBI a los inmuebles destinados a uso social -cesión gratuita o alquiler social a familias en riesgo de exclusión o en proceso de inclusión-, tras la certificación de la Concejalía de Bienestar Social.

En el caso del Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras, con el objetivo de incentivar las obras de reforma de inmuebles antiguos, se plantea la reducción del precio de casi todos los módulos adecuándolos a los precios actuales de mercado.

La tasa de recogida de residuos sólidos urbanos contempla un «ligero incremento medio» que «compensa en parte la subida en el coste del servicio y que tomará como referencia el valor catastral de los inmuebles». De esta forma, 35.000 viviendas con un valor catastral más bajo no verán incrementado el recibo de la basura; las 35.000 con mayores valores catastrales tendrán una subida en su recibo en 9,2 euros, y a las 17.500 viviendas restantes, con valores medios, les subirá 4,61 euros el recibo.