El mercado de la Playa del Arenal sigue sin fecha de inauguración.

Más de un año se está gestionando desde el Ayuntamiento de Borriana pero su apertura depende ahora de la colocación de una valla de dos metros de altura que cerrará el espacio que ocupen las paradas, evitando con ello que las bolsas de plástico lleguen al mar. Una valla más en el entorno del Arenal, un espacio que se considera abierto y cada año hay más vallas. Pero lo que no hay es un proyecto para que el espacio del Arenal cuente con algo más que el destino que tiene en la actualidad, celebrar el festival de música que tanto el ayuntamiento como la Conselleria de Turismo consideran importante para la promoción de la provincia.

Posiblemente la vuelta del mercado de la playa del Arenal sea uno de los proyectos más costosos en tiempo en el que esté trabajado la concejalía de Comercio, pero desde fuera da la impresión que a los ciudadanos se les está tomando el pelo ya que se están abriendo mercados en otras poblaciones y el de la playa sigue siendo un misterio. La concejala no supo o no pudo contestar a una pregunta en el pleno sobre la apertura del mercado y solamente dio a conocer el vallado de 2 metros de altura.

Que en la zona del Arenal se monte un mercado los domingos o no, debería ser secundario, lo que realmente debería tener prioridad es saber qué hacer con los terrenos del Arenal, presentar algún proyecto que clarificase todo el espacio existente y sacar provecho de cada una de las partes. Hasta el momento, lo que vemos cada día son unos terrenos la mayor parte del año abandonados, vallados y simplemente con la infraestructura necesaria para la época veraniega.

En estas fechas una de las imágenes que deberían observar los gobernantes es la de desde el paseo marítimo hasta la avenida del Mediterráneo, para que se dieran cuenta del tiempo que se está perdiendo en no urbanizar todos estos terrenos que para Borriana serían una de las salidas más importantes para su economía.

Pero esta situación de no saber qué hacer viene de lejos. Tanto que se han cumplido 50 años de propiedad municipal. Han pasado tantos gobiernos como proyectos desechados y cuando este municipio tenga que pelear para que el Arenal siga siendo de la ciudad y que no sean otros quienes decidan lo que hacer, nos acordaremos del tiempo perdido y de la falta de valentía para que el arenal haya sido una fuente de riqueza para esta ciudad.