La directora del IES Ribalta de Castelló cerró la puerta principal del centro educativo para prevenir que los manifestantes, que estaban realizando una asamblea informativa en el vestíbulo, procedieran al encierro y a pasar la noche en el instituto como protesta y acción de cara a la huelga del 9 de marzo.

La Plataforma Ampas por la Pública, el sindicato CGT y diversos colectivos del sector educativo de Castelló anunciaron la pasada semana diversos actos de protesta como acto de movilización para pedir la derogación de la LOMCE. Entre esas acciones, se anunció que se procedería a realizar una cena-encierro este lunes en el IES-Ribalta y una asamblea de la Plataforma per l'Ensenyament Públic, que se celebró ayer en el CEIP Bernat Artola y que se desarrolló sin incidentes.

En referencia a los hechos del lunes, la directora del centro, Paloma Segura, manifestó que «la asamblea estaba interrumpiendo el desarrollo normal de las clases, con gritos y aplausos» e indicó que el cierre de la puerta se produjo «de manera preventiva para impedir que pasaran la noche en el centro como habían anunciado y porque estaban alterando el normal funcionamiento lectivo».

Así mismo, Segura indicó que en ningún momento los alumnos estuvieron en peligro porque había puertas laterales abiertas y que «todos los días se cierra la puerta principal con el candado».

Por su parte, Víctor Tormo, del sindicato CGT, anunció que de resultas de estas actuaciones van a presentar hoy una denuncia en la Inspección de Trabajo y ante el conseller de Educación, Vicent Marzá, por «vulneración del derecho a huelga». Tormo explicó que la asamblea, que implicaba a unas 70 personas, se desarrolló con normalidad en el vestíbulo durante una hora y que la dirección impidió el acceso a la prensa y cerró las puertas. El sindicato CGT les acusa de «poner en peligro al alumnado» por cerrar las puertas en horario lectivo.

Los manifestantes también afearon a la dirección del centro que no facilitara el salón de actos para el desarrollo de la asamblea tras haberlo solicitado. Sin embargo, la directora, Paloma Segura, indicó que la petición «se hizo de manera verbal» y que no tiene constancia de que haya ningún escrito con dicha petición.