El pleno del Ayuntamiento de Almassora aprobará en sesión extraordinaria una modificación de créditos que incluirá los 520.000 euros necesarios para iniciar el proceso de licitación de las obras del trinquet municipal. La voluntad del equipo de gobierno es iniciar la tramitación de modo que sea posible reemprender los trabajos durante el periodo estival.

La alcaldesa, Susanna Nicolau, explicó ayer que «el proceso concursal puede extenderse hasta tres meses, por lo que necesitamos disponer de los fondos inmediatamente para activarlo y poder proseguir las obras en verano». La primer edil confirmó que el acuerdo al que el Ayuntamiento de Almassora llegó con la Dirección Territorial de Educación para llevar a cabo la demolición y la adecuación del solar durante las vacaciones escolares se repetiría de nuevo este año, de modo que «los trabajos más pesados se realizarán cuando el CEIP Errando Vilar esté vacío» y puedan reducirse las molestias.

El presupuesto estimado del proyecto es de 900.000 euros, una cantidad que será sufragada por el consistorio en dos anualidades. Los responsables municipales confían en recibir los 200.000 euros de financiación comprometidos por la Diputación de Castellón, aunque «por el momento sólo tenemos asegurados 50.000 euros», afirmó el concejal de Deportes, Xavier Trenco.

Más de 1.200 m2 y tres plantas

El anteproyecto del nuevo trinquet de Almassora ha creado una construcción de más de 1.200 m2 y tres plantas. El edificio, que se ubicará dentro del complejo deportivo de Boqueras, tendrá numerosas superficies acristaladas y se integrará en el paisaje urbano de la zona. La ubicación permitirá, además, optimizar los servicios de bar, consejería y limpieza de los que ya dispone el complejo y, por lo tanto, reducir los costes de mantenimiento.

Para el equipo de gobierno ha sido prioritario que el espacio pudiese ser utilizado por los centros educativos cercanos para actividades deportivas o de otra índole. Por ese motivo la primera fase de las obras, ejecutada en 2016, incluyó la construcción de un acceso que comunica directamente el CEIP Errando Vilar con el futuro trinquet. Asimismo, para que la proximidad del centro cause molestias durante las obras, los arquitectos municipales optaron por instalar una valla metálica de tres metros de altura que permanecerá durante todo el tiempo que duren los trabajos.

Como detalla el anteproyecto, está previsto que el trinquet tenga la zona de juego en la planta baja, que también dispondrá de porche de acceso, un vestíbulo, aseos y un almacén. El acceso a las gradas superiores estará en la primera planta, donde compartirá espacio los vestuarios, mientras que en la tercera planta habrá una galería de servicio y un área para elementos de iluminación.