El centenario de Caixalmassora está presente en toda la programación de las fiestas de Santa Quitèria de 2017 con un aumento importante del patrocinio de sus principales actividades, como ya quedó de manifiesto con el protagonismo adquirido en la Proclamación de la Reina de las Fiestas, Paula Cubertorer, o con el reparto de abanicos y sombreros durante la Romeria del pasado domingo. El aniversario bien lo merece. Por eso también se ha querido dar especial relevancia a la edición de un libro conmemorativo de estos cien años de historia, cuya presentación llenó ayer los remozados salones de la entidad.

El libro es en realidad una obra coral, bajo la coordinación de Raúl Pons, Primitiu García y Pepe Beltrán, quienes han contado para ello con la colaboración de Jordi Manrique, José Martinavarro, Juanma Velasco, José Feliu, Margarita Serra y Lleonard Sánchez, éste como responsable del diseño y maquetación. La presentación contó con la asistencia de las autoridades locales, así como con el presidente de Caixalmassora, Miguel Serra, y su directora general Marián Llop, además de reunir a numerosos socios, ex empleados y vecinos en general.

El acto de ayer sirvió para conocer algunos de los detalles que desvela la obra, que bebe del texto inédito de Javier Tomás Villarroya, ganador del concurso literario convocado con motivo del 50 aniversario, así como del que se editó con ocasión de las bodas de diamante del que es autor José Galí. El libro dedica un capítulo destacado a la contextualización histórica, al panorama de la Almassora de hace cien años y la influencia de Caixalmassora en el desarrollo de la localidad, un apartado escrito por Raúl Pons.

El historiador local Pivo García se ha encargado de recopilar los inicios de la cooperativa de crédito y su desarrollo, con especial énfasis en material desconocido de la Guerra Civil y documentación relevante fruto de su investigación. Pepe Beltrán se ha centrado en los últimos 25 años de la entidad, en cierto modo convulsos por la salida del grupo Credicoop y la aparición de candidaturas externas al consejo rector.

La obra la completan el capítulo dedicado a la Mutual Agraria, por parte de Juanma Velasco, que desde Almassora daba servicio a toda la provincia y hoy ha derivado en la Unión de Mutuas. Los arquitectos Jordi Manrique y José Martinavarro se han encargado de detallar todo lo referente al edificio social, levantado en 1929 y que ha sufrido varias remodelaciones, la última aún en curso. José Feliu ha escrito sobre el proceso de modernización constante de la entidad que le ha permitido mejorar día a día su servicio. Finalmente, Margarita Serra se ha ocupado de poner en valor el patrimonio cultural de Caixalmassora.