Fran Escribá (València, 1965) cogió las riendas del Villarreal CF el pasado verano en un momento de máxima dificultad. La directiva decidía prescindir de su antecesor, Marcelino García Toral, por sorpresa, días antes de disputar la previa de la Liga de Campeones contra el Mónaco y con un equipo repleto de bajas.

Con estas premisas ha logrado llevar al equipo a tener pie y medio en la Liga Europa la próxima temporada, pero ese premio se lo tendrá que ganar en la última jornada. Nada más y nada menos que ante el club en el que se forjó como jugador profesional y en el que dio sus primeras enseñanzas como entrenador.

Y es que Escribá jugó en las categorías inferiores del Valencia, entidad en la que años después comenzaría entrenando al alevín y en la que también ostentaría el cargo de coordinador del fútbol base. Años después fue segundo de Quique Sánchez Flores en distintos clubes, también en el Valencia, con el que fue finalista de la Intertoto (estuvo en el equipo valenciano desde la temporada 2005-2006 a la 2007-2008). Y, posteriormente, optó por iniciar su trayectoria como primer entrenador en solitario.

Un campo muy familiar

Este domingo, el entrenador del Villarreal visita un campo familiar, pero en el que no ha sido capaz de entrenar con los equipos a los que ha dirigido. El preparador del cuadro villarrealense debutó en Primera con el Elche en la 2013-14 y, desde entonces, ha jugado tres encuentro ante el equipo valencianista: dos con el conjunto italiano y uno con el Getafe.

En estos tres enfrentamientos anteriores, el entrenador del cuadro de la Plana Baixa acumula dos derrotas y un empate, con un total de cuatro goles a favor y siete en contra, ya que con el Elche perdió por 2-1 y 3-1, respectivamente, y con el Getafe empató a dos tantos en Mestalla.