No vieron al arácnido, no notaron su mordedura, pero sus síntomas, y sus efectos (mareos, fiebre o aparición de ampollas llenas de sangre hemolizada), fueron muy similares a los que provoca el que posiblemente mordió a un ondense: la araña violinista.

Una de estas afectadas es otra ondense, aunque sospecha que la mordedura se produjo en la Vall d'Uixó, donde trabaja y donde otra compañera ya sufrió dolencias similares el año pasado.

«Me empecé a encontrar mal, con dolor y picores en la pierna, el 3 de abril». Al día siguiente fue a un centro de salud de Onda, donde apuntaron la posibilidad de que fuera una araña la que le había mordido. Le recetaron, según relata, unas pastillas para el picor, pero al no remitir e ir a más, volvió a Urgencias del mismo ambulatorio al día siguiente y le dieron antibióticos.

Pero el sábado por la mañana la afectada ya no podía más y regresó al centro de salud, donde le hicieron un drenaje y le vendaron la pierna. El domingo, sin embargo, la hinchazón se estaba extendiendo desde la rodilla hasta el tobillo y bajó al Hospital de la Plana de Vila-real. El día 9 la ingresaron y estuvo en el hospital cuatro días, durante los cuales le pusieron el antibiótico en vena para que tuviera más eficacia. El tratamiento hizo su efecto y le dieron el alta. El diagnóstico, según aparece en el informe: «Linfagitis secundaria a picadura de insecto (sospecha)».

Tras recibir el alta del hospital, esta ondense continuó con el tratamiento durante 15 días y con las curas en la enfermería del centro de salud. El pasado miércoles recibió por fin el alta de enfermería, y todavía sigue sin saber qué animal le mordió, aunque no descarta que fuera la araña violinista. «No lo podían saber con seguridad, cuando me hicieron los cultivos no tenían con qué compararlo para saberlo a ciencia cierta», algo complicado si se trata de una especia invasora y con corta presencia en España.

Su compañera todavía lo pasó peor, con fiebre y dos semanas ingresada. Fue hace justo un año, cuando la supuesta araña le mordió en el pie. Tampoco lo notó. «Empezó a encontrarse mal, acudió al Hospital de la Plana de Vila-real y luego al Hospital General de Castelló, donde estuvo ingresada dos semanas».

Otra araña en Argelita

No es el único caso similar del que se tiene constancia. «En Argelita, durante las fiestas del año pasado, otra mujer, que sí que notó una pequeña mordedura, se sacudió la araña y la mató» A las horas también «le subió la fiebre y la tuvieron que atender en la ambulancia que estaba preparada para el 'bou embolat'», señala.

Y esta afectada, por supuesto, también es consciente del posible caso de Onda que ayer público Levante de Castelló, ya que «este hombre es el único que pudo cazar la araña».

Recordar que este ondense sufrió la mordedura el pasado 18 de mayo al despertarse, y al levantarse, el arácnido cayó al suelo, lo vio y lo mató. «Al notar el escozor y la hinchazón, observé que no era una picadura de mosquito, sino una mordedura», afirmó.

Poco después, según su testimonio, este hombre, también aficionado a la zoología, cogió la araña y la puso bajo una lupa. «Reconocí la marca en forma de violín que tiene esta especie de arácnido, y como el picor iba a más por el interior de la piel, coloqué la araña dentro de una bolsa y decidí ir al médico de forma inmediata».

Primero fue al hospital de la Plana, y al día siguiente, al General de Castelló con la araña en una bolsa. En este último centro hospitalario, al ver la mordedura y la araña, le diagnosticaron loxocelismo, según señala el informe de Urgencias, un cuadro tóxico producido por el veneno que inyectan arañas del género Loxosceles, al que pertenece la araña violinista. El rápido tratamiento resultó vital para que el vecino de Onda no empeorara.