Los estibadores inician esta semana tres jornadas de paros (hoy lunes, miércoles y viernes) para protestar contra decreto del Gobierno que liberaliza este sector. El azulejo advierte del desvío de mercancías de Castelló a otros países e, incluso, el posible cierre de hornos, mientras los trabajadores aseguran que el abastecimiento del sector está garantizado. Pararán una hora y trabajarán otra de manera sucesiva desde las 8 a las 20 horas en las jornadas de huelga.

El puerto de Castelló ha constituido una comité de coordinación para minimizar los efectos de los paros. Recientemente se reunió el mismo y los estibadores, según la Autoridad Portuaria, se comprometieron a trabajar con normalidad en las horas que operarán. Aseguraron que «su derecho de huelga no afectará derecho al trabajo» de empleados de la cerámica. Con este compromisos intentan tranquilizar a las empresas azulejeras, cuya patronal ha alertado en las últimas semanas de EREs por los paros.

El presidente del puerto de Castelló, Francisco Toledo, admite que la huelga tendrá un coste económico porque, además, coincidirá con una semana con una importante carga de trabajo, pero subraya que si los estibadores cumplen en sus horas de trabajo (la mitad de la jornada), el impacto «será asumible».

Cabe destacar que los paros encubiertos que se denuncian en puertos de España apenas se han llevado a cabo en Castelló. Hace dos semanas, cuando se anunció unos paros que luego se suspendieron, hubo dos días en los que la actividad se ralentizó pero sólo en unos determinados momentos.

Ascer insiste en que la «situación de crisis en los puertos solamente puede empeorar y desviar compras y movimientos de mercancías a otros países». «Sólo el anuncio de paros -independientemente de que al final se produzcan o no- tiene ya un efecto negativo para la exportación; exportación que está siendo en estos momentos la base de la recuperación económica. Los paros nos pueden afectar muy gravemente; la mercancía quedaría paralizada sin poder salir a nuestros mercados y por otro lado podemos llegar a sufrir el desabastecimiento de materias primas con la consecuente paralización de líneas de producción», explicaron fuentes de Ascer.

Los estibadores,, representados por la Coordinadora de Trabajadores del Mar, UGT, CC.OO, CIG y CGT, han convocado más paros los días 14, 16, 19, 21 y 23 de junio después de que este jueves la negociación con la patronal sobre los aspectos laborales de la reforma del sector de la estiba quedaran rotas ante el cambio de actitud de la patronal Anesco sobre el compromiso inicial de subrogar a todos los estibadores.

Por su parte, Anesco denuncia las bajadas de producción «que están realizando los trabajadores, como medida de presión a algunas de las empresas asociadas». Ha solicitado a la Inspección de Trabajo y al Ministerio de Fomento que actúen para garantizar los derechos y libertades de las empresas y de sus usuarios.