La Diputación Provincial de Castelló no va a rescatar la concesión de la Piscina Provincial, a pesar de que la empresa que tiene concedida la gestión ha anunciado que no va a pagar las nóminas de los trabajadores a partir del mes de julio. La entidad que preside Javier Moliner asegura que no puede actuar hasta que la empresa Aiguagest SL renuncie por escrito a la concesión.

No obstante, fuentes del equipo de gobierno de la diputación apuntaron que los servicios jurídicos y administrativos de la entidad han diseñado los posibles escenarios que afronta la instalación. La intención, apuntan las mismas fuentes, pasa por asegurar la continuidad del servicio y, hasta cierto punto, la estabilidad de los trabajadores. Cabe apuntar que las dificultades económicas por las que atraviesa la empresa amenazan incluso con la liquidación de la mercantil.

La empresa que gestiona la Piscina Provincial, Aiguagest SL, instó el preconcurso de acreedores el pasado mes de marzo, aduciendo pérdidas de más de 150.000 euros. Tras conocerse la noticia del preconcurso y el posible cierre de la Piscina Provincial, que adelantó Levante de Castelló, el diputado delegado del servicio de Deportes, Luis Martínez, se reunió con el gerente de Aiguagest, Cándido Carvajal. En ese encuentro, el diputado ya solicitó a la empresa que renunciara a la concesión, pero la gestora adujo razones jurídicas y manifestó que a partir de ese momento las acciones quedaban supeditadas a la opinión de sus abogados y a las circunstancias del preconcurso de acreedores.

Ante la dificultad de resolver la situación en el plano administrativo sin perjudicar al servicio y, en la manera de lo posible, a los trabajadores, técnicos de la diputación dibujaron los tres escenarios posibles.

En este sentido, el primer escenario pasa por contemplar que la empresa deje de manera súbita la gestión. En este caso, se vería afectado el servicio y la diputación estaría abocada a cerrar la piscina hasta que una empresa pudiera hacerse con la gestión en trámite de urgencia.

En un segundo caso teórico, desde la diputación se ha planteado la posibilidad de que Aiguagest SL renuncie a la concesión pero no quiera hacerse cargo del periodo de transición hasta que se pueda resolver una nueva licitación. Cabe apuntar que en el plano administrativo el plazo para una nueva adjudicación necesita cumplir los tiempos de publicidad y presentación de ofertas y que este paso se alargaría algunos meses.

Por último, un tercer escenario estipula un plano parecido al anterior en el que una empresa se haría cargo de la gestión de manera temporal. Pero, en este caso, desde la diputación se pediría a la empresa Aiguagest SL que renunciara por escrito a la concesión y que siguiera llevando la gestión de la Piscina Provincial hasta que se resolviera el proceso de licitación y adjudicación de una nueva concesión.

En cualquier caso, la Diputación de Castelló fía el desbloqueo de los escenarios a la renuncia a la concesión por parte de la empresa. Hasta la fecha, la entidad propietaria de la piscina no ha constatado incumplimientos de los parámetros indicados en el contrato de concesión que pudieran motivar el «rescate».

No obstante, en algunas ocasiones la Diputación de Castelló sí que ha intervenido para recuperar la gestión de concesiones administrativas, como es el caso de las plantas de purines. Allí se invirtieron más de 550.000 euros para «rescatar» la gestión de la planta de purines de Vall d'Alba.