El centro de interpretación sobre los refugios de la Guerra Civil de Castelló ha dado un nuevo paso con la formalización de las obras de rehabilitación y acondicionamiento del situado en las entrañas de la plaza Tetuán. El proyecto, que comenzará de manera inmediata, ha sido adjudicado por 64.386 euros a la empresa Gimecons Construcciones y Contratas SL y el objetivo es que este nuevo museo pueda abrir al público al inicio de la primavera de 2018, según explicó ayer la concejala de Cultura, Verònica Ruiz.

La edil avanzó que ya está en marcha el «plan de musealización» destinado a dotar de contenido a este nuevo foco cultural de la capital de la Plana. Se trata de parte del refugio de la Guerra Civil emplazado en el subsuelo de Tetuán, que es un pequeño recorrido del original ya que por las obras del Tram hubo un tramo que quedó inutilizado. La idea es recopilar fotos de la época, también de colecciones privadas y de particulares que se han puesto en contacto con el consistorio para tomar parte en la iniciativa, con especial colaboración del Grup per a la Recerca de la Memòria Històrica.

«Lo que queremos es que los castellonenses conozcan parte de la historia y puedan ponerse, en la medida de lo posible, en la piel de aquellos hombres y mujeres que tuvieron que esconderse de los bombardeos de la Legión Cóndor en refugios como el de la plaza Tetuán», señala Ruiz, quien añade que «queremos así dignificar a los castellonenses que murieron defendiendo los valores de la democracia». Según datos de la Recerca, Castelló cuenta con unos 300 refugios, de los que 43 son públicos.

La entrada al refugio, inapreciable casi para muchos vecinos que pasan a diario por la zona, es una pequeña plancha sobre el suelo que deberá ser transformada en un acceso adecuado en superficie. Por ello, como es de suponer, afectará al actual diseño de la plaza, que está presidida por la escultura 'Minerva paranoica' de Miquel Navarro y salpicada por las terrazas de cuatro restaurantes. Además, hay que recordar que es uno de los puntos de reunión habituales en las fiestas de la Magdalena al situarse en el lugar las carpas del Mesón Asturiano.

Sobre todos estos aspectos, la concejala de Cultura señaló que «se mirará el tema de las terrazas para intentar la menor afección posible», aunque consideró que «este museo será sin duda un aliciente cultural más y seguro que su existencia será beneficiosa para la hostelería de la zona».