El Castellón celebra esta tarde la Junta General de Accionistas en la Universitat Jaume I a partir de las 16.00 horas. Una junta muy esperada porque en ella se someterán a aprobación varios puntos -un total de once- y uno de los más importantes es la reducción del capitán social, previo paso de proponer una ampliación de capital de algo más de 900.000 euros, que se antoja insuficiente por la tremenda deuda -casi cinco millones de euros- que arrastra el club de la capital de la Plana. Curiosamente una ampliación similar a la que hace diez meses propuso el entonces máximo accionista, David Cruz, y que no se secundó.

Ese gran agujero de cinco millones de deuda es la herencia de los anteriores gestores y que, presumiblemente, engordó Cruz en los dos últimos años con un millóns más. Por tal motivo, hace falta una ampliación de capital, pero mínimo por esos casi cinco millones de deuda acumulada para subsanar de una vez por todas la delicada situación económica de la entidad albinegra.

Tras proponerse una reducción del capital social a diez céntimos la acción, se someterá a votación la ampliación por la cantidad anteriormente citada (902.000 euros).

Once puntos en el orden del día y sin ruegos ni preguntas. Se ratificará el nombramiento como consejeros de Vicente Montesinos, Ángel Dealbert y Pablo Hernández -representado por su padre, Alfonso, que ejerce de vicepresidente-; y se someterán a aprobación las cuentas de la temporada pasada, la 2016-17, y el presupuesto para el presente curso liguero 2017-18.

David Cruz tiene la última palabra para que todo lo anterior sea aprobado, ya que posee la mayoría accionarial y, por tanto, Vicente Montesinos deberá contar con la cesión de sus títulos para sacar adelante la reducción de capital que dejará prácticamente sin valor las acciones del máximo accionista.

En principio este aspecto no debería suponer ningún contratiempo puesto que los nuevos gestonres del Castellón accedieron a su cargo por la fórmula de la cooptación hace ya algunos meses y tendrían la libre disposición para aprobar la citada reducción de capital social y posterior ampliación sin ningún tipo de problema.

Desde el club se anunció también en su día que, una vez suscrita la mencionada ampliación de capital, los nuevos gestores pasarían a poner en marcha otras operaciones económicas para tratar de dar una mayor estabilidad a la entidad, a priori, con empresas que estarían interesadas en invertir en el Castellón en un futuro a corto-medio plazo.