El Villarreal encara una semana crucial, cuyo desenlace marcará los meses finales de la temporada en curso. El 3-1 encajado en Lyon endurece el objetivo de pasar de ronda en Liga Europa. Estar en el sorteo de los octavos de final está caro, está difícil, pero no imposible. El Olympique es un rival exuberante en ataque pero vulnerable en defensa. Tampoco atraviesa su mejor momento: no ha dejado la puerta a cero en ninguno de los ocho últimos partidos disputados. Tras el doloroso empate del domingo en el campo del Espanyol, el entrenador Javi Calleja envió un mensaje al cuadro galo: «Levantar un 3-1 no es fácil, pero cada partido es un mundo y esta es una eliminatoria a la que hay que darle la vuelta. Buscaremos la manera de hacerles daño».

El Villarreal maneja motivos para la esperanza. El Lyon ha encajado siempre al menos un gol en sus últimas siete salidas europeas, donde ha sufrido cuatro derrotas. El equipo francés solo ha dejado la puerta a cero en uno de sus últimos doce partidos. Se le hacen goles con relativa facilidad. Sin ir más lejos, el domingo desperdició dos tantos de ventaja en el campo del modesto Lille. Se marchó al descanso ganando 0-2, y terminó el partido con empate. Además en la Cerámica tendrá la baja del defensa brasileño Marçal, sancionado por acumulación de amonestaciones.

El equipo de Javi Calleja necesitará acentuar esta vulnerabilidad del rival con un mayor acierto de cara a puerta. El gol de Fornals en Lyon es la llave a la que se aferran los amarillos. En la historia europea del Villarreal ya lucen tres remontadas en casa tras una derrota en la ida. En una de ellas, además fue capaz de voltear dos goles de desventaja. Ocurrió en la Copa Intertoto de 2002. El Villarreal cayó 2-0 en la ida ante el Torino, y venció en el entonces Madrigal por idéntico resultado. Los amarillos consiguieron la victoria en la tanda de penaltis. Después de perder en la ida, el Villarreal ha dominado siempre. En los seis precedentes amasa cinco triunfos y un empate.

El premio es grande para ambos equipos, que apuestan por la Liga Europa como opción de título. El Villarreal es sexto en la clasificación liguera y el Lyon, cuarto, lejos del líder PSG. Los franceses tienen además una motivación extra, puesto que la final de la competición continental se disputará el 16 de mayo en Lyon. Para estar ahí el Villarreal necesita una noche histórica con remontada.