La Diputación de Valencia se ha convertido en la perfecta aliada para que los ayuntamientos puedan seguir manteniendo sus templos religiosos y aquellos edificios de valor histórico y patrimonial con los que cuentan en sus términos municipales. Todo gracias a las ayudas que concede anualmente para la recuperación de este tipo de instalaciones y que este año sumarán un total de 2,2 millones para toda la provincia, de los cuales sólo 209.800 euros serán destinados a la Safor.

La difícil situación económica que viven muchos municipios hace que los consistorios se vean en la obligación de priorizar proyectos y en el primer lugar de la lista siempre se encuentran aquellas actuaciones que afecten directamente al día a día del ciudadano. Ante este panorama, los principales damnificados siempre suelen ser edificios e instalaciones de valor histórico o cultural cuya reparación se hace muy complicada debido a su coste.

En ese grupo de instalaciones se encuentran también los templos religiosos. Las iglesias suelen subsistir, en gran parte, por las aportaciones de los mismos feligreses y, como no, gracias a las ayudas que reciben de organismos públicos como ahora la Diputación de Valencia. Los municipios de la Safor recibirán por parte del ente provincial un total de 209.800 euros para la restauración y adecuación de edificios de valor patrimonial, de los cuales la mayor parte se los han llevado los proyectos dirigidos a la mejora de estos templos.