Las siete fotografías de las víctimas de la represión en la Valencia republicana que han aparecido ahora, además de la que guardaba Juan José Ruiz, corresponden a personas que fueron enterradas en el primer cuadro de la fosa común de la Sección 5ª Derecha del Cementerio General. Este es el único sobre el que no se han construido nichos de los cuatro que tenía la fosa y en el que la dictadura levantó una gran cruz que aún sigue en pie.

Ruiz afirma que de aquí se exhumaron sin permiso más de 300 restos en 1959 para trasladarlos al Valle de los Caídos, entre ellos los de su abuelo, Juan Bautista Catalá Iborra, militante carlista asesinado el 17 de octubre de 1936.

En la provincia de Valencia murieron asesinadas o ejecutadas 2.844 personas durante la Guerra Civil, según el historiador Vicent Gabarda, quien añade que "vecinos de la ciudad de Valencia, o que así hayan podido ser identificados, fueron asesinados 872, de los cuales más de 500 fueron hallados en la ciudad y sus alrededores y, por tanto, enterrados el Cementerio General".

A las fosas comunes del General también fueron a parar vecinos de otros muchos lugares, como los 96 guardias civiles y 191 paisanos de Pozoblanco (Córdoba) y su comarca fusilados en Valencia, y también de otras provincias de España. "Pero, sobre todo,-prosigue- vecinos de otras comarcas valencianas como la Ribera, Safor, Camp de Túria y, especialmente, l'Horta, donde pueden contarse por cientos".

Gabarda concluye que los cadáveres "de la inmensa mayoría de los "paseados" en Paterna, Mislata, Benimàmet, Pinedo... eran llevados al cementerio de Valencia e inscritos en el Registro Civil de la ciudad". "De estas víctimas serían las fotografías que ahora han aparecido", apunta tras señalar que sería muy complicado saber cuántas se hicieron.