¿Qué es lo que vienen buscando sus alumnos en la Facultad de Bellas Artes?

Aquí viene gente con una determinación muy vocacional -en la admisión, hasta el número 140 tiene una nota de siete-, otros porque les han dicho que la facultad está bien o porque su futuro está relacionado con las Bellas Artes, también los hay que siente pasión por alguna de las disciplinas. Yo creo que algunos se matriculan porque son vocacionales y en ese grupo los hay con una idealización del arte, esos tópicos relacionados con la bohemia, de excesos. Otro tanto viene con una idea mas relacionada con las aplicaciones del arte o de la ilustración, el diseño, la publicidad. Hay gente que viene porque, a partir de 2010, se impartirán dos grados: Bellas Artes y Restauración, y saben que hay mercado. Hay una gran demanda: la nota de corte está en 6,5o.

¿Se puede vivir de lo que se enseña aquí?

Ese es el reto que tenemos. No sólo de pan vive el hombre. La vida espiritual es una cosa pero en una facultad que tiene más de 2.000 alumnos matriculados entre grados y master, pensar que solamente podemos formar o capacitar a profesionales de las artes en su expresión de "vivir del arte" es utópico e irreal hacérselo creer a los alumnos. Nosotros ponemos medios, habilitamos procesos docentes, enseñamos técnicas, contamos la historia, hablamos de referentes artísticos, pero eso no garantiza que sean artistas. Sí tenemos como reto intentar garantizar que lo que hacen aquí sea útil. La facultad no puede estar de espaldas al mundo. Les proporcionamos la la formación más integral posible, con herramientas que les capacite vivir en el mundo, que está muy duro. Con el tiempo, hemos visto que a pesar de ser una carrera muy vocacional, luego resulta que hay salidas, como en restauración.

¿Cómo se llevan con sus colegas técnicos del campus?

Muy bien. Somos la única facultad de Bellas Artes en un campus politécnico. Nos hemos ido ganando un hueco. La prueba son los presupuestos que nos dedican en infraestructuras. El rector actual ha hecho un esfuerzo de gestión, y allá donde va subraya que formamos parte de la Politécnica. Es un lujo trabajar en esta condiciones. También me parece lógico que el arte, con su componente técnica, forme parte de este colectivo. Trabajamos en un proyecto interdisciplinar.

El rector dice que esta facultad es la joya de la corona hasta el punto de querer incluir la palabra "Ars" en el emblema de la Universidad.

Él lo dice porque lo cree. Es un centro con demanda sostenida.

¿Apuesta incondicional por el rector Juan Juliá?

Absoluta. Nuestra apuesta ha sido nítida y por su parte tenemos la correspondencia. Por primera vez tenemos dos vicerrectores de la casa, Juan Bautista Peiró y Victoria Vivancos.