La alcaldesa de Aldaia, la socialista Empar Navarro, considera que el último pronunciamiento del Tribunal Supremo sobre el subtramo del AVE Motilla-Valencia es "la consecuencia de las cosas mal hechas desde el principio". Así, Navarro recuerda que cuando se hizo público el proyecto, en la etapa de José María Aznar en la presidencia del Gobierno, y de Álvarez Cascos al frente del Ministerio de Fomento, el consistorio ya envió alegaciones que "fueron desoídas". De ahí que determinados aspectos no fueran incluídos en la declaración de impacto ambiental que más tarde de aprobó. Por ello, el proceso judicial emprendido por el consistorio era "el paso que correspondía administrativamente para mantener la coherencia de nuestras reivindicaciones".

Tras conocer el resultado del recurso de casación, que confirmó la sentencia de la Audiencia Nacional de 2007, Empar Navarro remitió cartas a diferentes instancias del Ministerio de Fomento, en la que informaba de la recepción del fallo y solicitaba que se adoptaran "todas las medidas necesarias" para subsanar los problemas. La mandataria ha mantenido diversos contactos con Fomento desde ese momento y "todo indica que están trabajando para subsanarlo".

Respecto a la afección real que la infraestructura, una vez acabada y en funcionamiento, puede suponer para el municipio de Aldaia en temas de inundabilidad en caso de avenidas, Navarro indica que "durante la construcción del trazado, se han realizado algunas modificaciones del proyecto, en este sentido y se ha ido teniendo en cuenta lo que defendía el ayuntamiento, porque hemos estaso encima en cada paso que se ha dado". No obstante, "si es suficiente lo que se ha hecho, tendrá que verse en el futuro".

Otro procesos judiciales

Por otra parte, los consistorios de Torrent y Alaquàs también recurrieron el subtramo, aunque al ceder Fomento y soterrar la infraestructura entre sus términos, los retiraron.