Valencia fue ayer una digna anfitriona de la protesta mundial a favor del fundador de Wikileaks, Julian Assange, impulsada por una página web valenciana. Alrededor de 200 personas se concentraron a las 18.00 horas ante las puertas del consulado de Suecia en el Cap i Casal para pedir la libertad de Assange y la restitución del portal desde el que se han filtrado miles documentos de la diplomacia estadounidense.

Otras ciudades españolas, como Madrid, Barcelona, Sevilla, Alicante o Málaga, y grandes capitales como Londres, Amsterdam, Buenos Aires, Sao Paulo, Bogotá o Lima han protagonizado también concentraciones similares a la de Valencia tras la convocatoria que se hizo a través de la página "Libertad para Wikileaks" (freewikileaks.eu). La web -alojada en el servidor Liveyeah, también valenciano- la crearon el pasado jueves de madrugada Borja Terraso, Benjamín Velasco e Isacar Marín, y desde entonces ha recibido 68.000 visitas.

Por supuesto, Borja, Benjamín e Isacar acudieron a la Porta de la Mar para participar en la manifestación frente al consulado sueco. Pero fue Isacar el que llevó la voz cantante, atendiendo a los medios de comunicación y hablando con los agentes de la Policía Nacional y Local que se desplazaron hasta allí para seguir de cerca la concentración. "El jueves pedimos permiso a la Delegación del Gobierno y aún no nos han contestado, por lo que entendemos que no hay ningún problema", afirmaba el joven. Lo cierto es que la policía se limitó a vigilar a los manifestantes pero no intervino en ningún momento.

A las 18.00 horas, cuando estaba previsto el comienzo de la manifestación, apenas era una veintena las personas situadas tras la pancarta en la que se podía leer "Por la libertad. No al terrorismo de estado". Pero este pequeño grupo se desplazó desde el Parterre hasta el número 4 de la Porta de la Mar, y por el camino se le fue uniendo más y más gente hasta reunir a unas doscientas personas (300 según los organizadores). "Assange ha empezado algo que ahora nosotros tenemos que continuar -explicaba Susana, una de las participantes-. Al final el poder para cambiar las cosas lo tenemos nosotros".

Al principio parecía que costaba decidir si iba a ser una concentración silenciosa o una protesta a gritos. Uno de los manifestantes grito varias consignas a través de un megáfono -"libertad para Assange", "libertad de expresión"- y Antonio Marín, padre de Isacar y portavoz de Cercle Obert de Benicalap, reclamó mayor transparencia en las instituciones.

A continuación tomó la palabra Isacar Marín quien, con un tono menos airado que su progenitor, defendió el concepto de libertad que representa Wikileaks y leyó el manifiesto en favor de Assange que ha redacto junto a sus amigos y colgado en freewikileaks.eu. El acto finalizó con la invitación del joven bloguero valenciano a seguir participando en próximas protestas. "La gente debe atreverse a pensar, a hablar y a expresar lo que no le gusta", concluyó Marín.

"Una ventana abierta a la información"

"Wikileaks es una ventana abierta a la libre información", explicó Javier Flores en Madrid, donde se reunieron unas 250 personas. Unas 300 personas se reunieron frente al consulado británico en Barcelona; más de un centenar lo hizo en la Plaza de España de Zaragoza; varias decenas ante el Ayuntamiento de Sevilla, y medio centenar en la Plaza de la Constitución en Málaga, para dar lectura todos al mismo manifiesto. En él, los promotores reclaman que el Reino Unido deje en libertad a Assange, pendiente de una posible extradición a Suecia por un supuesto delito de abusos sexuales y que restablezcan el dominio de Wikileaks. Atribuyen la situación legal de Assange a una acción para facilitar que acabe ante la justicia de Estados Unidos.